Aunque con Jay hacíais una cosa muy diferente, mucho más orientado hacia una dirección noise y de guitarras distorsionadas, en vuestro último disco ‘Fuimos Nosotros’ ya se podían intuir novedades más cercanas a Mundo Prestigio en todo lo que eran las bases rítmicas y la forma de añadir alguna que otra capa de teclados. ¿Creéis que las canciones de este disco os abrieron algo los ojos a la hora de explorar nuevos caminos?

Fer: sí, yo creo que cuando hicimos ese disco ya estábamos escuchando cosas y artistas que nos interesaban, que iban por otro camino. Fue como la mezcla entre de donde veníamos y hacia dónde queríamos ir. Era bastante una transición. Si hubiéramos hecho un cuarto disco de Jay ya habría sido totalmente a lo Mundo Prestigio, por eso nos cambiamos el nombre.

Julián: además, también iba un poco sobre darnos cuenta de que podíamos tocar cosas que no fuesen una punkarrada. No estábamos al principio muy seguros de que pudiésemos hacerlo, pero con este disco descubrimos que sí. También hubo una época muy importante entre que fuimos Jay y Mundo Prestigio que tocábamos solo versiones de Britney Spears, Cristina Aguilera y movidas así. Los ensayos eran muy guays porque estábamos cuatro horas para sacar una canción de Cristina Aguilera.

Fer: por lo general se podía decir que necesitábamos rebajar testosterona en el grupo (risas).

 

También es cierto que parece que toda aquella escena noise tan poderosa que había en Galicia con Jay, Guerrera, Unicornibot o incluso Disco! Las Palmeras ha tendido a disolverse o embarcarse en otros proyectos bastante diferentes. ¿Vosotros en algún momento sentisteis que realmente se todo lo que estabais logrando con estas bandas podía tener bastante proyección o lo visteis siempre bastante reducido a lo local?

Julián: realmente no se. Igual si hubiese pasado en Madrid pues sí que hubiese estado toda la prensa encima. Es que al final es especular con lo que podía haber pasado. Fue lo que fue, estuvo muy guay y nos llevábamos estupendo entre toda la peña. Por lo menos podías tocar en Galicia y que viniesen otros 20 amigos de otros grupos a verte. De vez en cuando pues también podíamos salir a tocar fuera. Moló que al final se juntase gente que le molaban las guitarras distorsionadas. Esa gente pues la mayoría sigue tocando o seguimos tocando en otros proyectos y te une más con ellos una amistad hacer otras cosas. Da igual lo que el haga el otro, si electrónica o lo que sea. Nos une la música y la amistad, por lo que podemos seguir tocando juntos.

Fer: tampoco tenemos una perspectiva desde fuera de como veía nos veía la gente. Nosotros desde dentro veíamos que había amigos que se conocían de tocar en bandas y luego al final nos acabábamos conociendo todos. Era todo muy natural y orgánico. No se desde otras partes de España como se veía esto, si daba la sensación de que iba a crecer más. También creo que había una infraestructura que ahora no hay. Justo coincidió un momento hace unos 5 años más o menos que había como una sala autogestionada en cada ciudad de Galicia y se podía hablar de un tejido importante. Se daban todas las circunstancias perfectas para que fuera un buen momento para para hacer este tipo de música. Ahora lo mejor es más complicado porque dependes directamente de las salas, de instituciones, de los sellos o de lo que sea. Quizás antes había una micro industria más al margen de todo eso.

"Hubo una época muy importante entre que fuimos Jay y Mundo Prestigio que tocábamos solo versiones de Britney Spears, Cristina Aguilera y movidas así."

Volviendo a la actualidad y a Mundo Prestigio, resulta complicado encontrar bandas en nuestro país que se puedan mover en los terrenos musicales en los que estáis ahora. ¿Consideráis que esto también es algo que juega a vuestro favor de alguna forma?

Julián: a nuestro a favor desde luego que no, o por lo menos hasta ahora. Tampoco lo veo como una desventaja. Creo que Mundo Prestigio somos como una especie de híbrido entre ser boomers llevando instrumentos de verdad y al mismo tiempo descolocar a la gente llevando samplers. Igual no sabes si hay peña tocando o es una base producida por un tío con una 404. No se, quizás si fuese Otero solo con el sampler funcionaría igual de bien Mundo Prestigio que yendo todos a tocar. No se si la peña lo aprecia igual. Nuestros colegas que son de nuestra edad sí que ven guay que vayamos a tocar todos, mientras que un chaval de 16 años piensa que es ridículo que esta peña venga de Vigo hasta Barcelona con un puto bajo y un ampli en vez de llevar solo el sampler. A nosotros desde luego que nos mola presentarlo como lo hacemos. A lo mejor lo que hacemos nosotros quizás podría ir solo Nuno, que colabora con nosotros, se enchufa las bases y a la gente le parecería igual de guapo.

Fer: yo creo que si tiene algún tipo de originalidad el grupo es porque nos limitamos a nuestras posibilidades, a hacer lo que podemos. Lo que teníamos claro es que queríamos hacer un grupo los cuatro, y como dice Julián, aunque un proyecto lo puedas sacar adelante con una persona y un par de máquinas, nosotros teníamos claro que todos teníamos que tocar algo. Hay que buscarse siempre la vida y salió de esta forma. Al final todo lo original del grupo es fruto de la casualidad.

"Creo que Mundo Prestigio somos como una especie de híbrido entre ser boomers llevando instrumentos de verdad y al mismo tiempo descolocar a la gente llevando samplers. "

Algo que también me gusta mucho es esa idea de que sois un grupo que está en contacto total con un montón de artistas ajenos al grupo, algo que me recuerda un poco a lo que Gorillaz llevan haciendo toda la vida. ¿En vuestra cabeza también os gusta ese concepto de banda que esté asociada constantemente a otros artistas?

Fer: siempre me ha gustado la idea de tener un proyecto así, que te permita colaborar con peña. Por ejemplo a Mariagrep no la conocíamos personalmente y a penas habíamos escuchado un poco de su música, pero pensamos que molaría un montón hacer algo con ella. A lo mejor si tuviésemos otra filosofía de grupo o una banda con cantante no nos plantearíamos estas cosas que siempre molan mucho.

Julián: además luego somos cuatro amigos que tenemos nuestras dinámicas que peña que siempre está junta, entonces cuando viene alguien de fuera cambia todo esto. Sin ir más lejos, el otro día tocando en Vigo, estuvo María con nosotros y nos sentíamos como estar en un grupo nuevo. Ya que estaba en la ciudad pues tocamos también un tema. Cada cantante lo acaba llevando a su movida y esa idea de cambiar con según quién colaboras es algo con lo que encajamos muy bien.

Fer: además lo mejor de tener un grupo muchas veces es la parte extramusical. Todo lo que pasa antes y después del concierto es casi tan importante como el propio concierto. La gente que conoces y todas las redes que estás tendiendo de cara a llevarte guay con tu entorno es igual de interesante que hacer un temazo. Intentamos cuidar siempre mucho esa parte, porque nos flipa tanto tocar la batería y el bajo como tomarnos una caña con quien está por ahí. La música siempre ayuda a encontrar a esa gente con la que encajas.

 

Resulta muy interesante como a lo largo de vuestra trayectoria no os habéis cerrado ninguna puerta, saltando del italo disco de ‘Quen Quere Falar’ hasta por ejemplo el toque más nostálgico de la reciente ‘Superbuena’. ¿Creéis que para vosotros es importante no tener ningún tipo de prejuicio en cuanto a los estilos que podéis incorporar en vuestra música y que estáis muy abiertos en ese sentido?

Fer: sí claro, yo creo que nos creemos que a veces somos una banda de hip hop y rap porque ahí es donde nos encontramos más cómodos, pero siento que hemos hecho contadas canciones de este palo. El resto es simplemente tocar y tiene mucho más que ver con la instrumentación y con como componemos que el hecho de ajustarte a un estilo en concreto. No somos desde luego muy de atarnos a una movida en concreta, haciendo una canción y diciendo que esto no es suficientemente rap y darle otra vuelta. Componemos canciones igual en cuatro minutos y si en esos cuatro minutos no ha salido la canción que nos mola es que no va a salir ya.

Julián: no podemos tener un grupo y decir que queremos unos violines en esta canción, porque no podemos contratar a cuarenta violinistas que grabaron en un estudio yankee que no lo conoce ni dios. Los disco donde aparece eso siempre suenan guay, pero no podemos permitírnoslo. Como tampoco tenemos esas habilidades de esta gente yankee que son unos fueras de serie, pues tenemos que ensayar bastante. Al final en el hip hop todas las frases beben de cinco o seis estilos diferentes y todo eso también es hip hop en realidad. Por lo tanto podíamos hacer una playlist de 20 canciones con una base medio italo disco como la de ‘Quen Quere Falar’ con un pavo rapeando seguro, pero tampoco tiene sentido. Entonces lo del rap y hip hop lo veo como una etiqueta en plan loco para que nos metan en algún sitio.

Fer: nosotros grabamos con Heavy de Malandrómeda que es como un referente del hip hop. Él en las primeras grabaciones tenía como una mezcla clarísima de tener el bombo en un sitio, el bajo también alto y el resto oculto. Pensábamos que estaba guay pero queríamos subirle los sintes y él no lo entendía porque nos decía que pensaba que éramos un puto grupo de rap. Nosotros le decíamos que sí, pero le pedíamos que nos lo subiese un poquito. Luego él ya nos decía que quizás no fuésemos un grupo de rap y se metía con nosotros. Quizás hay que darse cuenta de que tenemos canciones que tienen otro tipo de ideas que no encaja para nada con el rap. Luego las colaboraciones ayudan un montón a eso. Por ejemplo vamos a sacar un EP con Nuno donde claro, él se cree que está rapeando pero está haciendo otra cosa que también queda estupendamente.

Julián: mola eso de decirle que en realidad no está rapeando, que está casi agonizando, que al final queda guapísimo.

Fer: la clave es seguírselo diciendo para que lo siga haciendo igual que es lo que mola.

"Al final todo lo original del grupo es fruto de la casualidad."

De hecho la locura que ha sacado ahora con Grande Amore, no se sabe bien si es post punk o que es, pero engancha por todos los sitios.

Julián: Nuno tiene esa mítica voz yankee rollo el pavo de Television, que parece que está desafinada pero que queda increíble. Te da igual lo que cante, como si se marca la lista de la compra sobre una base, que seguro que va a molar. Entonces está guay, porque en el EP ya sabemos que nos mola eso y se tira para adelante. Es como un punki medio muriéndose sobre una base medio rap.

Fer: rollo como si tu madre te estuviese echando la bronca muy enfadada y le pones una base. Es increíble lo que consigue.

Julián: lo bueno de todo es que Nuno puede hacerlo, cosa que ninguno de nosotros no. Así que siempre lo llamamos.

Un poco en esta dirección, también me parece bastante excitante el hecho de que sois muy imprevisibles con todo lo que sacáis. ¿De alguna forma sentís que la seña de identidad de Mundo Prestigio es no saber por donde vais a salir u os ha llegado a preocupar en algún momento que podáis descolocar mucho a la gente cuando sacáis un tema nuevo?

Julián: esa sensación siempre la tienes, pero realmente nos da igual porque con el dinero que ganamos con Mundo Prestigio pues no nos vamos a preocupar por eso. Lo que quiero es hacer canciones con Nuno, con María o con quien sea, y por supuesto, creo que también tenemos como músicos un desafío de tocar haciendo algo guapísimo. Somos amigos, y por ejemplo, me puede decir Fer a mí: tío ahí ese bajo puedes hacerlo mejor. Lo que mola de la música es realmente hacerla y ser consciente de que estás haciendo algo que mola mogollón. El resto, pues si viviésemos todos de esto pues nos preocuparíamos más. Claro está que a veces te rallas y piensas que de donde sale esta movida, pero da igual, porque no nos vamos a hacer ni ricos ni pobres con esto.

Fer: no hay ninguna estrategia. Nosotros funcionamos más bien para complacernos a nosotros mismos y creemos que siempre es bueno conectar con alguien que está ahí fuera y entienda lo que hacemos. Seguro que es algo que piensan muchos artistas. Sí que suele pasar a veces a posteriori que tenemos unas expectativas con algo y nos damos cuenta de que no se ve de la misma forma desde fuera. De los pocos ejemplos que hemos podido tener, está el tema con Ortiga, que pensábamos que iba ser un hit, pero cuando salió la gente nos decía que estaba bien pero que era una canción súper contenida. Chicho acaba cantando en una octava súper grave, con una energía contenida y es un ejemplo de lo que nos pasa cuando nos hacemos un mínimo de expectativas con algo.

 

Ahondando más de lleno en vuestras dinámicas como banda, a la hora de conseguir unas canciones tan variadas en matices, no se si tenéis alguna forma preestablecida de trabajarlas, si empezáis más bien por la parte de samples o más bien intentáis siempre que todo fluya sin ningún plan en mente.

Julián: cuando vemos que hay algo aprovechable con el sampler, sabemos que es a partir de donde tenemos que seguir y así es como solemos funcionar. A parte es que muchas veces pasan cosas raras, porque cuando pillas samples de discos viejos a veces no están afinados como los necesitas. Obviamente puedes hacer cosas increíbles sin empezar por ello pero nosotros no solemos hacerlo así.

Fer: además tenemos a Brais a cargo del sampler, que él no es músico sino cocinero. Cuando teníamos ya el grupo, quería empezar a tope a hacer samples y nosotros como somos músicos, siempre dependemos de que él traiga de casa sus cachitos de canciones. Así nosotros podemos luego tocar por encima y crear los temas. Él como no tiene ningún tipo de formación musical pues sigue más bien su intuición, trayéndonos cachos increíbles y ya encargándonos nosotros de lo demás.

"Nos creemos que a veces somos una banda de hip hop y rap porque ahí es donde nos encontramos más cómodos, pero siento que hemos hecho contadas canciones de este palo. "

Hablando ahora un poco de vuestra trayectoria hasta la fecha y como habéis evolucionado, vuestro EP debut homónimo tenía ciertos elementos más jazzísticos a lo BADBADNOTGOOD que quizás se han ido diluyendo más con el tiempo. ¿Desde dentro sentís que también habéis ido superando también etapas y que hay cosas que ya no os encajan tanto con lo que hacéis ahora?

Fer: creo que cuando empiezas a samplear, por los estímulos externos que tienes acerca de lo que se supone que es samplear y como salen las bases, acabas yendo directo al jazz. Te pillas unos discos de John Coltraine y otro de Miles Davis y de aquí seguro que sale todo lo que necesitas. Descubrimos que no, que puedes samplear un tema rollo africano que tiene instrumentos totalmente fuera de lo convencional y también queda impresionante. Quizás el darnos cuenta de estas ideas es algo que nos ha permitido evolucionar a lo largo de los EPs.

Julián: también porque cuando vamos a grabar seis temas, o los que sean, igual dos semanas antes tenemos nueve o diez. Luego pensamos con quien vamos a hacer las voces si las hacemos y es entonces cuando vemos realmente cuales encajan. Es también lo que dice Fer, que luego vas sampleando cosas diferentes y vas ampliando más tu campo. También quizás cuando nos ponemos a hacer una grabación, hay meses en los que los dedicamos a hacer beats y tenemos que sacar alguna cosa que tenga sentido entre sí. Luego a veces en cuanto tienen sentido para uno de nosotros, esta persona insiste y acaba saliendo adelante. Otra cosa que ocurre es que cuando queremos colaborar con alguien les pasamos unos cuantos para que sean ellos los que escojan.

 

Hablando precisamente de ‘La Mansion Du Bonheur’ es una canción que me flipa un montón y que tiene ese toque como más lánguido y reflexivo. ¿Cómo surgió este tema o cual fue un poco el punto de partida para lograrlo?

Julián: no te lo puedo asegurar pero creo que fue uno de esos beats que Brais lo tocase un momento y en seguida con una mínima idea de bajo y sintes salió. Teníamos unas pocas partes que las juntamos al momento y sentimos que ya estaba. Es casi uno de esos temas de los que le puedes dar vueltas, pero que tampoco tiene mucho sentido porque en sí ya estaba.

Fer: además Brais ya traía de casa bastante claro el fraseo del tema y los cortes. Normalmente cuando ensayamos, como él es el primero en montar sus cables y cosas, y nosotros tenemos que montar más historias para la batería, él se encuentra tocando durante la hora y media que hacemos lo nuestro. Durante ese tiempo él ya va pensando en lo que vamos a tocar los demás. Creo que este tema surgió de uno de esos momentos.

Julián: también creo que a esta canción le ayudó un montón el vídeo que le pusieron Rapapawn. Siempre hacemos publicidad de esto porque nos mola mucho lo que hacen.

Fer: también es interesante como a través de este vídeo, la marca de sintetizadores Moog contactaron con ellos para hacer un vídeo promocional de unos productos nuevos que van a sacar.

Fer: al margen de esto, también hace poco estuvimos con gente de Francia que a los 10 segundos identificó el sample de Brigitte Bardot. Siempre tratamos de no rallarnos mucho con estas cosas, pero siempre hay gente que si lo empezamos a petar querrán su dinerito. Por lo tanto cuanto menos identificables sean los samples mejor. Sin embargo en este caso pues en Francia desde luego que están ya al loro y podríamos estar jodidos.

La verdad es que a mí me cuesta bastante reconocer de donde provienen vuestros samples, pero a la mínima que a alguien le suene algo pues ya imagino que saltan las alarmas.

Julián: realmente ojalá llegue el momento de tener que repartir pasta, pero ahora mismo me llega la nieta de Brigitte Bardot y me dice de repartir los euros, la llevo enseguida al banco y los repartimos a medias.

Fer: a lo mejor no le daría ni para pagar el avión, y menos el abogado. Quizás para la llamada de teléfono sí.

Julián: nos daría para comer en un sitio decente de Galicia, rollo 30 euros cada uno y luego un helado.

 

Centrándonos ahora en el directo que ofrecisteis en Sound Isidro, llevasteis unos cuantos invitados de lujo. ¿Desde dentro sentís que cambia un montón el enfoque que le tenéis que dar a los directos cuando contáis con su respaldo vocal a cuando no contáis con ellos?

Fer: la verdad es que lo enfocamos todo igual pero sin pensar en las voces. Sí que estamos ahora un poco concienciándonos de que tenemos que dar con buenos temas que funcionen estando solos porque tenemos que ofrecer directos sólidos como banda y no depender de montar una fiesta de la leche con todos los colegas y colaboradores. A lo mejor no siempre va a ser posible y la gente que venga se puede sentir estafada. Al final se trata de mantener el nivel.

Julián: es lo que hay realmente. Si vas a vernos y no hay vocalistas no será porque nosotros no hemos querido llevarlos. De todas formas cuando vienen colaboradores también dejamos muchas cosas sin tocar que nos gustan o perdemos transiciones del directo que creo que están guays. Considero que podemos hacer algo bastante decente nosotros solos. También nos molaría el hecho de ver que nos pidiesen siempre desplazar peña, porque eso significaría que le mola lo que hacemos. Ahora cuando vienen los colegas lo hacen porque sale de ellos, ya que les damos cuatro pavos por darles algo. Otra cosa que ocurre mucho que cuando metemos una voz en el tema, la gente al final se acaba quedando con eso y no la parte instrumental.

Hablando ahora del futuro, en los últimos meses habéis publicado ‘Millonario’, ‘Superbuena’ y ‘La Mansion Du Bonheur’. ¿Creéis que formarán parte de una referencia mayor u os mola mucho más la idea de dirigir vuestra carrera más bien mediante singles?

Fer: estas tres canciones las grabamos ya pensadas para que saliesen como singles y no son adelanto de nada, aunque en algunos sitios los ponían como adelantos. Lo que vamos a sacar es un EP no tardando, que estamos muy cómodos con él, porque es algo breve donde puedes hacer una selección de cinco temas que tengan un poco más de sentido entre sí. Luego si te vas a un disco largo tendría que haber mucho más trabajo en el sentido de hacer doce canciones concienzudamente pensadas para que sigan un orden. De momento esto es algo que no lo hemos planteado. Nuestro sello nos da ideas pero hay que ir poco a poco. A medio corto plazo, desde luego que vamos a tener más ganas de hacer un EP.

Julián: lo bueno y lo malo de tocar con alguien que no es de tu grupo es que si haces algo que os gusta a todos pues empiezas a hacer más cosas después. Por ejemplo, el otro día cuando hicimos una base para que tocase Mariagrep un tema suyo en su concierto en Vigo era como sentir que podían salir más cosas juntos. Igual prefiero hacer cuatro temas juntos que lanzarme a por un disco. Con Cibrán o Chicho nos ocurre también algo parecido. Hasta el momento esta forma de trabajo es ideal para nosotros, porque nos concentramos en hacer un número de beats, los hacemos con el cantante, hacemos una criba y así funciona todo bien. Ojalá siempre nos pase con todo el mundo que colaboremos.

"Suele pasar a veces a posteriori que tenemos unas expectativas con algo y nos damos cuenta de que no se ve de la misma forma desde fuera."

Cerrando ya las preguntas, en todas nuestras entrevistas nos gusta que nos dejéis una pregunta para la siguiente banda a entrevistar. ¿Cuál es la vuestra?

Julián: ¿cuál fue el pero trato recibido durante tu carrera musical? Da igual que fuese por el jefe de una discográfica como por el camarero del sitio más chungo en el que han tocado.

Del mismo modo tengo una para vosotros a cargo de Marina Allen: ¿qué pensaría tu yo infantil de lo que eres hoy?

Julián: creo que estaría contento. Tengo un perro, un grupo, toco con Fer… A lo mejor también podría pensar que soy un pringado, pero eso no quiere decir que realmente sea un pringado.

Fer: si tuviese cinco años y me viera pensaría que estoy haciendo y estaría decepcionado por no vivir en la Casa Blanca. A medida que he ido creciendo me he dado cuenta de que por ejemplo cuando yo tenía 8 años y veía a la gente de 27 eran adultos de largo recorrido, que trabaja en oficinas y vivía en mansiones, pero resulta que no.

Julián: la respuesta corta es que nos diría que estábamos acabados.

Fer: además resulta que de pequeño odiaba la música, la clase del colegio la odiaba. Así que imagínate lo que pensaría de mí mismo ahora…

Julián: a mí me pasaba que en el colegio suspendía música por la flauta. A mí no me apetecía para nada tocar eso y fui retrasado en la música hasta que descubrí que podías tocar otras cosas más allá de la flauta.