Siempre he pensado que vuestros trabajos poseen una gran variedad de estilos, algo que vuelve a ocurrir en este nuevo. ¿Creéis que siempre uno de vuestros objetivos a la hora de hacer un disco es el de lograr que sea lo más dinámico y variado posible?

Macie: No es algo en lo que pensemos conscientemente cuando hacemos un álbum, pero es divertido que acabe siendo así. Nuestro objetivo en los discos anteriores, y especialmente para este, era encontrar arreglos que sirvan mejor a la canción y la lleven a la forma que necesite para hacer de la canción el centro.

Sima: Nunca nos propusimos hacer un tipo de disco, uno que exista dentro de un universo sonoro preexistente. Siempre queremos encontrar el nuestro propio. Nuestros cerebros musicales se formaron con muchas influencias diversas, así que supongo que esto es lo que sale de nosotras.

Hablando ahora de las novedades a nivel sonoro que posee este disco, siento que por momentos hay una mayor influencia que nunca antes de la canción americana en vuestra música. ¿Sentís que ha ocurrido esto?

Macie: Quizás sí. Sé que ambas hemos estado escribiendo canciones durante mucho tiempo, y los últimos años nos han dado la oportunidad de expandir realmente esa habilidad y profundizar un poco más en nuestro propio proceso de composición. Nos propusimos asegurarnos de que los arreglos sirvieran a la canción y no al revés en este disco. Creo que la música folk americana a menudo se centra en “la canción” como pieza central, y de esa manera puedo ver algunas conexiones entre lo que hemos hecho y la tradición de la música folk americana.

Sima: Ciertamente hay más guitarra acústica en este disco, fue un instrumento presente durante todo el proceso de escritura, arreglo y grabación. Además, hay una nitidez real en cómo tratamos las voces para que realmente puedas escuchar todas las letras claramente, de una manera que parece que estamos cantando bajo las estrellas directamente para ti. Creo que ambas cosas hacen que el disco se sienta más arraigado en el mundo de la música folk americana. Tenemos una apreciación cada vez más profunda por la creación de canciones y la narración de historias, cómo puede invitar a la gente a compartir la ira y la alegría con nosotras. Pensamos en ocasiones aquello de ¿qué dicen las personas sobre los estadounidenses, que siempre están sonriendo? A veces es difícil saber qué nos hace sonar americanas, somos notoriamente malas para escuchar nuestros propios acentos.

Siempre me ha encantado el enfoque vocal que poseen vuestros temas, apareciendo momentos donde pareciera que se alternan los roles de voz principal y armonía. ¿Tenéis algún tipo de regla para decidir el papel de vuestras voces en vuestras canciones o es algo que surge de forma natural?

Macie: No tenemos una regla estricta sobre dónde deben situarse nuestras voces en las canciones. Si es una canción que una de nosotras ha escrito, generalmente esa persona canta la voz principal, pero no siempre. A veces intercambiamos armonías de registro bajo y alto porque nuestras voces son tan diferentes que al hacerlo puede cambiar significativamente la textura de una canción, y nos gusta poder jugar de esa manera. Es una de las razones por las que nos atraía tanto cantar juntas y estar en una banda.

Me encanta como a lo largo de este trabajo, logras que las canciones siempre contengan múltiples sorpresas, ofreciendo siempre pequeñas melodías que acompañan a las principales. ¿Sentís que vuestra forma de componer canciones está muy relacionada con tratar de lograr muchos giros y cambios en las canciones?

Macie: No lo creo. A veces ocurre porque estamos tratando de transmitir algo emocionalmente, y mantener la tensión o el suspense a través del arreglo es una forma de lograrlo. Es gracioso que lo digas, porque siento que algunas de las canciones de este disco son las más directas. Sin embargo, definitivamente hay momentos inesperados en canciones como ‘Naked’ o ‘Dirt’. Esas canciones también tratan distintivamente sobre la incomodidad y la capacidad de soportarla de alguna manera, así que creo que algunas de las ideas de arreglo y acordes refuerzan esa idea.

"Dentro del grupo, siempre hay una confianza en que la otra persona que te dará espacio para seguir adelante con las ideas que tienes para los temas."

En algunas canciones, se percibe a nivel lírico una gran honestidad y vulnerabilidad. ¿Creéis que el ser amigas desde hace tantos años también es una ventaja a la hora de poder lograr unas letras más confesionales?

Sima: Sí, éramos amigas cuando comenzó la banda, pero eso ha evolucionado hacia una amistad mucho más profunda e íntima con los años, una que se parece más a una relación de hermanos, o como nos gusta bromear, un matrimonio.

Macie: Sé que he ganado mucha más confianza en mi composición, pero eso es en parte porque cada vez he estado mucho más segura y confiada en nuestra colaboración. La forma en que escribo canciones es inherentemente muy personal porque es como proceso varias experiencias de la vida, y creo que a medida que hemos crecido como amigas y como banda, es mucho más fácil compartir esas partes más oscuras de mí con Sima y viceversa. Dentro del grupo, siempre hay una confianza en que la otra persona que te dará espacio para seguir adelante con las ideas que tienes para los temas.

El sentido del humor también está presente en algunos puntos del disco. ¿Sentís que para vosotras es importante también mostrar un cierto grado de diversión que se contraponga a los momentos más complicados?

Macie: Sí. La vida no es solo tristeza ni solo diversión.

Sima: Tenemos que reír en los momentos más tristes y, a veces, nuestros momentos más felices nos hacen llorar. Es curioso, la verdad. Nos encanta perdernos y divertirnos en el cruce de emociones que aparece en nuestras canciones. Apenas podemos contenernos cuando tocamos este disco en vivo ahora, así que sí, creemos en la diversión. También me gusta que el sentido del humor sea una de las pocas cosas que nos mantiene por encima de los robots.

‘Not God’, la canción que da título al disco, posee alguno de los momentos más intensos del álbum, sonando además de una forma bastante grandilocuente. ¿Sentís que de algún modo el contenido de esta canción influyó enormemente en el enfoque del disco?

Sima: Esta canción de alguna manera establece el tono para el álbum. Escribimos las canciones mientras ambas intentábamos encontrar nuestro lugar en el mundo durante los últimos 5 años. Todos nuestros dramas y éxitos personales están saliendo de nuestros corazones y rostros mientras nuestro instinto lidia con la nube de cinismo que se aproxima rápidamente. Quiero decir, para cualquier cosa que quieras hacer hoy en día, como puede ser planificar tu futuro, estar en una banda, hacer música, encontrar atención médica, sentirte humana, tienes que enfrentarte a alguna fuerza poderosa que intenta robarte tu autonomía y tu capacidad para trabajar hacia esos objetivos. Creo que ‘Not God’ apunta directamente a esas cosas y fue una de las primeras que grabamos en la sesión, por lo que señaló los matices del disco en una dirección determinada.

Muchas letras del disco tocan temas existenciales y de crecimiento personal. ¿Fue una búsqueda intencionada o simplemente fluyó orgánicamente?

Sima: Escribo mucho a partir de observar a otras personas. A veces trato de observarme a mí misma desde un personaje inventado que es una mezcla de personas con las que me he cruzado en mi vida. Imaginando que soy el héroe, el enemigo, el "dios" o el acosador de alguien. Mirando hacia los personajes que odio, ciertos políticos, fanáticos de mente cerrada, y burlándome de la pequeñez en su cerebro que generó odio y miedo en su corazón, e infló sus egos. Nunca intento escribir intencionalmente sobre algo en particular porque saldría forzado. Como en la escritura libre, dejo que las palabras me encuentren y luego, cuando se fusionan en un significado y es algo que me siento bien diciendo, sé que he llegado a algún lugar con la canción.

Macie: Para mí, la música siempre ha sido una forma de explorar mis sentimientos más profundos porque es lo que fluye a través de mí con la menor cantidad de autocensura. A medida que he crecido y he comenzado a confiar más en mí misma, ha sido más fácil expresar esas cosas, pero sigue siendo una manera de procesar mis emociones y descubrir cosas sobre mí misma que tal vez no me daría cuenta en la superficie. Hay una magia en escribir una canción; a veces, si piensas demasiado en ello, puedes arruinarla. Eso no siempre es cierto, pero siento que dejar que las cosas fluyan de manera orgánica y dejar que tu subconsciente guíe el camino al menos te señalará una dirección verdadera.

"Escribo mucho a partir de observar a otras personas. A veces trato de observarme a mí misma desde un personaje inventado que es una mezcla de personas con las que me he cruzado en mi vida. "

Pienso también que las letras de este disco también contienen un gran análisis y expresión de emociones que pueden resultar fácilmente reconocibles para el oyente. ¿Consideráis que en la composición de vuestras canciones siempre tenéis en mente el intentar comunicar lo que sentís de la forma más directa posible?

Sima: A veces escribimos de manera sencilla, a veces puede parecer más difícil de entender al principio. Creo que nuestra esperanza es que la gente se acerque a nuestro álbum como si estuviera teniendo una conversación con nosotras. Una conversación de escucha activa. Tal vez la persona que habla está tratando de encontrar sus palabras y el oyente está diciendo: "Creo que sé a qué te refieres, eso me hace pensar en esto en mi vida". Eso invita a las personas a interpretar y digerir la canción como quieran.

El final de la canción ‘Cardinal’ es uno de esos momentos del disco que parece de lo más catártico. ¿Desde dentro sentís que lograr una canción de estas características resultó de lo más terapéutico?

Macie: Este es uno de los momentos más catárticos de nuestros directos en este momento. Es un momento en el que podemos soltarnos y dejar que nos perdamos un poco el control. Vivimos en un mundo donde a menudo estamos condicionadas a luchar con nosotras mismas contra simplemente ser nosotras mismas, y esa lucha puede manifestarse interna y externamente de muchas maneras diferentes. Creo que gran parte de este disco trata sobre esa lucha de poder: a nivel macro, sintiendo una ira justa hacia los que están en el poder y sintiéndose impotente o abrumado por los profundos sistemas de opresión, y a nivel micro, con cómo ejercemos poder sobre los demás o sobre nosotros mismos. Creo que es muy importante hacerte notar.

El cierre del disco con ‘As You Are’, me parece un final precioso, donde mostráis la cara de lo cotidiano más relacionado con el sentirse bien, además de mostrar un gran aprecio hacia la otra persona. ¿Veis esta canción como una celebración de los pequeños momentos de la vida más disfrutables?

Macie: Esta canción es una canción de amor para la amistad. Celebra a la persona con la que expandes tu imaginación y te enamoras antes incluso de saber qué es una relación.

Hablando ahora de la forma en la que aparece estructurado el disco, ¿pensaste mucho en cómo se relacionan las canciones del disco para establecer una lógica en su orden?

Macie: No estoy segura de qué fuerza guía nos ayudó a llegar a ese orden, pero ahora que empezamos a llevar las canciones al directo, cada vez le vemos más sentido.

Canciones como ‘Hungry’ muestran también esa voluntad de rebelión, de tratar de luchar para salir adelante una misma. ¿Consideráis que este disco también esconde muchos momentos relacionados con liberar ciertas dosis de rabia y poder avanzar?

Macie: Interesante pregunta. No creo que este álbum esté ocultando nada, pero estábamos hablando de eso el otro día. Algunos de los solos de guitarra parecen estar a punto de explotar, pero los cortamos; algunas de las canciones parecen estar construyendo hacia una catarsis, pero la bajamos en el último segundo. Creo que todo esto subconscientemente se relaciona con esa lucha de poder de la que hemos estado hablando. Sin embargo, creo que uno de los momentos puros de liberación está al final de ‘Hungry’. "Ahora solo me alimento a mí misma" es una letra que se repite interminablemente al final de ‘Hungry’, y mientras comienza como este... anuncio de soledad y soledad, se convierte en este mantra que es más celebratorio y lleno de tanto sentimiento. A través de la repetición de la frase, cambia de significado. La canción comienza en su propia isla y luego atraviesa esa energía estancada y tensa para revelar que en realidad es un viaje para descubrir qué te alimenta verdaderamente. Esa canción me emociona ahora, porque ha llegado a significar mucho para Sima y para mí, y por diferentes razones. Es una de esas cosas espectaculares y celebratorias cuando estás en una banda con dos compositoras: la capacidad de habitar una canción con diferentes perspectivas y obtener algo de ella.

"Vivimos en un mundo donde a menudo estamos condicionadas a luchar con nosotras mismas contra simplemente ser nosotras mismas, y esa lucha puede manifestarse interna y externamente de muchas maneras diferentes."

Considerando que la composición y la producción son procesos largos y desafiantes, ¿cómo mantenéis la motivación y la energía a lo largo de todo el proceso del disco? ¿Qué estrategias utilizáis para superar los momentos de bloqueo o frustración?

Macie: Intentamos detenernos y tomar aire. Ambas hemos mejorado en expresar las cosas pero también en entender nuestras propias reacciones viscerales y las de la otra ante las cosas. A veces solo necesitas dormir sobre algo. El compromiso y la colaboración no siempre son fáciles, pero tienes que alejarte y recordar que eliges ser creativo con personas que brindan un tipo de luz que no necesariamente tienes dentro de ti. Entonces... ve a ver qué ilumina y tal vez encuentres algo emocionante o repulsivo, cualquiera de los dos estimula la creatividad.

En todas nuestras entrevistas nos gusta que nos dejéis una pregunta para la siguiente banda a entrevistar. ¿Cuál es la tuya?

Macie: ¿Cuál es una canción que amas y que desearías poder reescribir ligeramente?

Del mismo modo tengo una para vosotras a cargo de Villagers: ¿cuál fue el primer disco que comprásteis?

Macie: Creo que fue ‘Tragic Kingdom’ de No Doubt. O ‘In Utero’ de Nirvana.