Noche más que importante para todos los fans de Bigh Thief, ya que la banda regresaba a la capital para presentarnos los temas contenidos en su más que inspirador Dragon New Warm Mountain I Belive In You, un disco con el que seguramente han redefinido todo lo que son capaces de hacer sin perder la esencia tan espontánea de sus canciones. Sabiendo de entrada como cada uno de sus conciertos siempre cuenta con un punto de imprevisibilidad, no acostumbrándonos a repetir setlists casi nunca, las expectativas estaban cuanto menos desatadas por descubrir que nos encontraríamos a su paso por La Riviera. El resultado fue una velada marcada por la emoción desbordante, pero también por la crudeza y la capacidad de poder ser un montón de bandas diferentes en tan solo un directo, algo que a la postre hace que aún crezca aún más nuestra admiración por la formación.

Antes de dejarnos llevar hacia los espacios más íntimos de Big Thief, Lutalo se encargó de demostrarnos un talento innato para facturar canciones difíciles de ubicar dentro de un plano artístico concreto. Presentándose solo con su guitarra en el inmenso escenario, nos ofreció una buena muestra de su EP debut Once Now, Then Again al mismo tiempo de aventurarnos un buen puñado de canciones que formarán parte de una futura referencia de la que aún desconocemos más detalles. Si en su versión de estudio nos encontramos ante unas canciones que parten de la calidez y los sonidos acústicos mejor llevados al plano ambiental, en esta puesta en vivo prefirió desvestir al máximo sus temas, logrando un enfoque más artesanal, mucho más relacionado con revelar los entresijos compositivos que habitan en ellos.

Evidenciando cómo, ante todo, en sus composiciones siempre busca transmitir sensaciones muy precisas, nos ofreció composiciones como 'Call It In', donde fue liberando de forma progresiva esa serenidad tan embriagadora que lo caracteriza. De una forma agradecida y recordándonos cómo siempre tenemos que cuidar los unos a los otros, su directo discurrió, por momentos, a través de derroteros más bañados por un formato de folk cocido a fuego lento, llegando el turno de composiciones como 'For Now', donde nos hizo ver también cómo su música puede contener buenos ganchos melódicos. En el apartado de la presentación de nuevos temas, pudimos comprobar cómo todo lo que está por llegar se orienta hacia una dirección más agitada, pudiéndolo comprobar en una composición que interpretó junto a Max Oleartchik. Con este cúmulo de contrastes bien amortiguados, pudimos sentir cómo, sin duda alguna, Lutalo irá ganando más y más presencia en los escenarios de todo el mundo en poco tiempo.

De forma puntual, Big Thief salieron al escenario a su hora programada, disponiéndose los cuatro miembros en la parte frontal del escenario. Sin embargo, el directo arrancó solo con la voz y guitarra de Adrianne para presentarnos 'Already Lost', una de las múltiples composiciones que aún no han editado y que supuso una introducción perfecta a la forma en la que crean espacios vulnerables de gran valor. A través de una historia donde la memoria juega un papel importante, la cantante abrió un directo que continuaría de una forma bastante mansa gracias a 'Happiness', otro de esos temas que aún no tienen registro en el estudio. Con esta puesta en escena, donde ante todo primaba la calidez de los recuerdos más felices, notábamos cómo Adrianne se encontraba muy cómoda, atendiendo de forma divertida la petición de un fan de tocar 'Time Escaping' y ofreciéndonos una versión recitada del tema a modo de poema.

Con una recta inicial de lo más prometedora, estaba claro que el directo iba a resultar de lo más libre en cuanto a la configuración del setlist, decantándose a continuación por darle un buen repaso a su LP más reciente. Así es como cayeron '12,000 Lines' y 'Dried Roses', esta última tocada con una energía bastante desgarradora en comparación con su versión de estudio. Quizás fue en este punto donde nos dimos cuenta de cómo Big Thief pueden adaptar sus canciones a cualquier tipo de circunstancias, interpretándolas cada noche de forma diferente según sean los condicionantes y el estado de ánimo que impregne a sus miembros. Alternando entre la búsqueda de dulzura y la necesidad de depurar emociones turbulentas, el concierto continuó con una versión de 'Certainty' que contó con un punto de aceleración extra, todo ello comprobando la sonrisa dibujada en la cara de Adrianne.

A través de más canciones inéditas como 'Born For Loving You', nos fuimos introduciendo hacia la parte del concierto donde claramente se trataba de mostrar cómo Big Thief también pueden ser una banda donde el ruido puede resultar su mejor amigo. Así nos lo hicieron ver con las interpretaciones de 'Masterpiece' y 'Shark Smile', logrando echar la mirada hacia atrás dentro de su trayectoria, recordándonos las múltiples y emocionantes variantes compositivas que nos han mostrado a lo largo de estos años. Conectando todas ellas a través de la reciente 'Vampire Empire', llegaron los últimos coletazos del directo con las sobrecogedoras interpretaciones de 'Flower of Blood' y la propia 'Dragon New Warm Mountain I Believe In You'.

Logrando que suenen tan sentidas como, por momentos, totalmente altivas, nos condujeron hacia la necesidad de que también pueda haber catarsis a través de la exploración de emociones oscuras, comprendiendo bien que no son dos canciones cualquiera de su discografía. A pesar de haber desatado la mayor tempestad posible, el bis corrió a cargo de una 'Spud Infinity' interpretada junto a Noah Lenker, situándose justamente en la cara opuesta a los anteriores temas, recordándonos cómo el viaje a lo más profundo de la tradición cultural de su país también puede resultar muy divertido.