El año pasado Junco y Mimbre irrumpieron con un LP debut de lo más plácido, cargado de ese formato de pop relacionado con plasmar episodios entusiasmantes muy al estilo de Me and the Bees, solo que todo ello con momentos donde las guitarras alcanzan un estruendo que siempre permanece bajo control. A través de estas coordenadas sonoras construyendo unas canciones con las que dejar constancia de todos los altibajos que nos podemos encontrar en la vida, intentando en todo momento emerger a la superficie a base de actitud. Pues bien, unos cuantos meses después ya tenemos con nosotros una nueva referencia suya como es este ‘Or a la llera’. En este nuevo conjunto formado por cuatro temas nos encontramos ante una continuación bastante natural de todo lo mostrado en su primera referencia, destacando aún más si cabe los ambientes distendidos y esa forma de buscar los rayos de sol en los días en los que parece que no hay ninguno. Adentrándose en los rasgos inherentes de la personalidad humana, tal y como se muestra en el tema que da título al trabajo, el grupo introduce nuevas narrativas que tratan de explorar la forma en la que nos comunicamos con todo lo que tenemos a nuestro alrededor.
Con más puntos destacados del disco, canciones como ‘Apnea’ juguetean más con una guitarras que tiene un cierto punto embelesante, aportando de este modo algún recurso más cercano al bubblegum pop que sirve siempre para templar los ánimos de una buena forma. Más detalles interesantes se desprenden de composiciones como ‘Equilibri’, intentado afinar más que nunca su capacidad para obtener ganchos melódicos que perduran en el tiempo. Incidiendo de nuevo en lo necesario que es visualizar estampas más positivas de todo lo que está por llegar, el grupo nos transmite una vez más como el componente existencial de su música está también relacionado con encontrar pequeños escapismos en nuestro día a día. Por último, cerrando la referencia no podíamos olvidarnos de una ‘Imatge inversa’ donde apelan una vez más al poder de la imaginación para diseñar escenarios más favorables, todo ello rebajando las pulsaciones y apuntando a su cara más relacionada con el dream pop guitarrero.