El norteamericano Aaron Maine se adentra de lleno en el synth pop de tintes comedidos en esta nueva referencia, la primera publicada bajo Domino Records. Si con su anterior LP Slow Dance in the Cosmos, publicado allá por 2013, revoloteaba alrededor de unas canciones de un pop deconstruido, muy al estilo de Nick Diamonds al frente de Islands, en este Pool el músico apuesta de lleno por los ambientes de placidez sintética. Las doce canciones que contiene el trabajo encierran el buen gusto por esa mezcla entre la nueva etapa de Jeremy Jay y unos Crystal Stills abrazando de lleno los teclados. Seguramente sea esa sensación de estar en terreno de nadie, incluso acercándose al dream pop en temas como ‘Glow’, lo que hace que Porches haya conseguido un notable trabajo.

Lo bueno de este Pool es que la escucha del trabajo nos puede resultar hasta corta, en base de la fuerte cohesión que presentan los temas entre sí, sin aparecer ningún tipo de experimento que se salga de la tónica general de elegancia pop presente. Sin embargo, sí que nos encontramos canciones con una clara vocación de single como es el caso de ‘Be Apart’, el tema que lógicamente sirvió como anticipo del trabajo. En él aparecen frases como “I want to be a part of it all”, donde se refleja la situación de Aaron en estos últimos meses respecto a su nueva vida en Nueva York, después de vivir tantos años en una ciudad cercana a Westchester.

Seguramente el punto de encuentro entre este nuevo trabajo y su anterior entrega sea ‘Car’, el tema del trabajo donde las guitarras resultan persistentes y envolventes, dejando de lado la carga electrónica. En el otro extremo, donde los ambientes sintéticos salen a relucir más que nunca, aparecen canciones como ‘Pool’ o ‘Sharpe’, donde lejos de sonar demasiado matemáticas y medidas, muestran una calidez envidiable, confirmando como el músico siempre permanece fiel al núcleo melódico de sus temas. Seguramente esta característica se encuentra magnificada especialmente en ‘Mood’, una de las canciones que más gira entorno a la voz del músico.

A pesar de que Krankie Cosmos es la novia y compañera de piso de Aaron y que éste es el batería en la banda habitual de Frankie, los coros femeninos escogidos en temas como 'Hour' y 'Glow' han corrido a cargo de Greta Kline y Maya Laner consiguiendo un recurso extra que enfatiza la narrativa de pensamiento interior que contiene la mayor parte del trabajo. De este modo, Porches ha sabido muy bien hacia donde extender sus influencias para lograr un destacado trabajo en este arranque del 2016.