Review

Lose

Cymbals Eat Guitars

2014

8


Por -

El álbum vital e imprescindible de Cymbals Eat Guitars no llegó a la primera de cambio. Nadie dijo que sería fácil materializar un buen disco de rock y cautivar a las masas, pero al final parece que eso ha ocurrido. Y no de forma deliberada. Desde el principio, la trayectoria de este cuarteto de Staten Island se ha visto marcada por cantidad de factores adversos, muchos fruto de esa llama que emerge de lo más profundo de Lose (Barsuck Records), que no es otra que la pérdida de Benjamin High, amigo íntimo del líder de la banda, Joseph D'Agostino. Por primera vez apreciamos un cambio sensible en el grupo que se ve reflejado especialmente en su actitud y que podríamos resumir en un: "cuando la muerte irrumpe en nuestras vidas, no todo está perdido".

Lo decía D'Agostino meses antes de presentar el álbum: por primera vez, su ausencia constituye la principal fuente de inspiración. Inevitablemente, con ella también han arrastrado otras frustraciones que la vida les ha deparado, tanto a lo largo de su infancia como en su época post-adolescente, cuando creían que un buen disco de rock podía cambiar la vida de todos. Con Why There Are Mountains (2009) se demostró que, efectivamente, eso no siempre es así. Fue un discazo como la copa de un pino al que muy pocos tuvieron en cuenta y que, no en vano, daría buena cuenta de lo que podían aportar en un futuro.

Cinco años después llega su tercer disco de estudio para disipar cualquier duda. Cymbals Eat Guitars vuelven enfurecidos pero más serenos que nunca, mostrando su melancolía habitual a través de melodías sosegadas y guitarras que se engrandecen con el suceder. Paradójicamente, también recuperan buena parte de las armonías que olvidaron en Lenses Alien (2011), logrando así que Lose sea un disco más obvio que sus antecesores. El aprendizaje del que hablábamos al principio se manifiesta de entrada en 'Jackson', un tema marca de la casa que alude a la mitología musical y geográfica de Nueva Jersey. Son seis minutos que muestran una transformación anímica fascinante; resumen muy bien el espíritu de superación de la banda, entre los inconfundibles alaridos de D'Agostino, que exhiben nuevos registros de su voz (diáfana, pero también bestial), y guitarras que culminan el tema con verdadero triunfo.

'Xr' refrenda esa perspectiva con abrumadora euforia, arrollando a todo lo que se cruza en su camino, mientras que 'Place Names' y 'Chil Bride' adoptan un tono más apesadumbrado, que no dramático. Cambios sensibles se divisan en 'Laramie', ocho minutos polifacéticos en los que hay momentos de todo y para todo. Los sintetizadores iniciales abrazan dócilmente a los setenta y la implicación vocal de D'Agostino es tal que por momentos llegamos a sintonizar con algunos de los temas más espléndidos de su debut (los interminables coros de 'Share'). '2 Hip Soul' pone la guinda al pastel recreando esas agrias desolaciones con especial grandilocuencia, culminando de esta forma un disco de indie rock al que podríamos calificar de mayúsculo.

Álbum

Lose

Artista

Cymbals Eat Guitars

Año

2014

Màrius

Comunicador audiovisual y marketing digital. Mis referencias musicales van de Jeff Buckley a Albert Pla. Todo en esta vida es compatible.

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