Review

Hatchie - Liquorice

Hatchie

2025

8


Por -

Hatchie ha construido su carrera buscando un equilibrio entre la dulzura del recuerdo y la necesidad de avanzar sin perder identidad. Tras una etapa de mayor exposición, marcada por la búsqueda de una perfección cercana al brillo publicitario, decidió alejarse de la velocidad y volver a un espacio donde la composición recupera naturalidad. De ese gesto nace ‘Liquorice’, un trabajo que refleja un periodo de repliegue vital y se compuso entre rutinas domésticas y una serenidad recién conquistada. La artista encontró una manera distinta de escucharse, apartada de la presión exterior. Desde el primer minuto, las canciones fluyen con un aire relajado que transmite cercanía y una madurez adquirida tras los altibajos de los años anteriores. La producción de Melina Duterte y la complicidad de Joe Agius aportan una textura de confianza, casi como si se tratara de una conversación entre amigos que se entienden sin grandes explicaciones.

En ‘Anemoia’ se percibe esa vuelta a lo esencial. Su ritmo pausado y el eco de los sintetizadores dibujan la imagen de alguien que asume el paso del tiempo sin resistencia. La frase “Maybe the world you want has to slip away” marca un punto simbólico: aceptar la pérdida como parte del crecimiento. Hatchie escribe desde la observación de los sentimientos cuando ya se han calmado, con la claridad de quien ha vivido las consecuencias de sus impulsos. Ese tono atraviesa ‘Only One Laughing’, donde la ironía del título refleja el intento de mantener la ligereza ante el desencanto. La risa se convierte en una forma de sostener la distancia emocional, mientras la melodía flota entre esperanza y resignación. Todo muestra a una compositora que ha aprendido a traducir las emociones sin adornarlas, usando cada capa de sonido como una respiración.

‘Carousel’ lleva esa idea un paso más allá. Su estructura circular transmite la sensación de repetir un recuerdo hasta desgastarlo, girando sobre una misma imagen para entender qué quedó por decir. El verso “lost control of myself” actúa como reflejo de esa impotencia cotidiana que acompaña a los amores pasados. Hatchie usa la repetición para construir un eco que encierra tanto nostalgia como aceptación. La voz se mezcla con las guitarras en un pulso constante entre deseo y serenidad. En ‘Lose It Again’ reaparece el enfrentamiento entre entrega y autocontrol, un juego de dependencia en el que el impulso de seguir sintiendo persiste incluso cuando el vínculo se ha disuelto. La canción avanza con una cadencia que combina suavidad y estallido, reforzando esa contradicción entre entusiasmo y necesidad de estabilidad.

En el bloque central del álbum, Hatchie enfoca su escritura hacia la comunicación y sus grietas. ‘Sage’, ‘Wonder’ y ‘Someone Else’s News’ forman una tríada donde la frustración y la necesidad de contacto se entrelazan. En ‘Sage’, la autora pide continuidad en una relación que se diluye, mientras en ‘Wonder’ se enfrenta a la certeza de una ruptura inevitable con una frialdad casi analítica. “I want you to hang on every word I said” suena como una constatación de poder más que como súplica, revelando una mirada menos ingenua sobre la atracción. ‘Someone Else’s News’ introduce una distancia más emocional que física: la observación del otro cuando ya se percibe como ajeno. En todas estas piezas se aprecia una intención clara de mostrar los matices del afecto contemporáneo, donde la comunicación se vuelve difusa y la empatía convive con el orgullo. La autora logra reflejar esa tensión tanto en las letras como en la estructura de los temas.

‘Liquorice’ da nombre al proyecto y condensa su sentido. La mezcla de sabores que evoca el título actúa como metáfora del amor cuando se acepta su ambigüedad. Hatchie usa la dulzura como punto de partida, pero introduce una acidez que sugiere desconfianza. Su voz aparece entre capas de sonido que se expanden y contraen como si buscaran un punto entre ternura y distanciamiento. En ‘Part That Bleeds’, esa exploración alcanza una de sus formas más precisas. La canción avanza con lentitud, como si cada compás intentara retener una emoción que amenaza con desaparecer. Justo antes del estribillo, la pausa prolongada introduce un instante de vacío que acentúa el contenido de la letra. Es un ejemplo de cómo Hatchie ha aprendido a construir tensión transformando la contención en herramienta expresiva.

En la parte final, ‘Anchor’ y ‘Stuck’ cierran el recorrido con un aire de conclusión vital. La primera encarna la imagen de un vínculo que impide avanzar, con un tono contemplativo que sugiere resignación más que tristeza. La segunda rompe esa inercia con energía renovada. “I’m still stuck with these pathetic dreams” es una confesión directa, casi irónica, donde la artista admite la persistencia del deseo como parte inseparable de su identidad. Esa honestidad da sentido al cierre del álbum, que suena como la mirada de alguien que ha aprendido a convivir con lo que no puede modificar. ‘Stuck’ representa una aceptación consciente del propio carácter, y esa actitud convierte el final en un gesto de madurez sin solemnidad.

Hatchie demuestra en ‘Liquorice’ que la serenidad también puede tener intensidad. Su escritura, centrada en los matices del afecto, ofrece una visión lúcida de los vínculos actuales. Cada canción aborda una emoción concreta con transparencia, permitiendo que las letras respiren dentro de un paisaje sonoro claro y cercano. La artista se consolida como una narradora capaz de transformar las incertidumbres cotidianas en arte, convirtiendo la melancolía en claridad. Este trabajo confirma una forma de equilibrio entre la distancia y la entrega.

Conclusión

En ‘Liquorice’, Hatchie canaliza la nostalgia hacia una forma de claridad emocional, transformando la melancolía en aceptación y utilizando cada canción como reflejo de la madurez alcanzada.

8

Álbum

Hatchie - Liquorice

Artista

Hatchie

Año

2025

Discográfica

Secretly Canadian

Tratando de escribir casi siempre sobre las cosas que me gustan.