Review

Haley Heynderickx - Seed of a Seed

Haley Heynderickx

2024

8.5


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¿Cómo vivir en una realidad que se muestra frágil, invadida por el ruido y la prisa, sin perdernos en ella? Esta cuestión parece resonar en cada nota de ‘Seed of a Seed’, el segundo trabajo de Haley Heynderickx, un disco que, sin aspavientos, nos invita a mirar hacia adentro y cuestionar la relación que sostenemos con el entorno. Entre los versos de Heynderickx se percibe una tensión sutil: ¿existe realmente una manera de vivir al margen de lo que nos consume, sin perder de vista lo esencial?

El álbum abre con ‘Gemini’, donde la protagonista se enfrenta a una versión pasada de sí misma, un reflejo inquietante que emerge en medio del caos moderno. La letra es explícita: ‘There’s a woman in the corner claiming she is just the former one of me’, describe un yo fragmentado, atrapado entre la soledad y la compulsión de escapar. Las escenas que dibuja, de textos sin responder y objetos adquiridos sin necesidad, capturan esa desconexión tan familiar hoy en día. Es una carta de presentación donde el paisaje interno y el físico se funden, como si buscar un trébol en la carretera fuera tan importante como hallar un momento de quietud.

Esta tensión entre lo antiguo y lo nuevo se extiende a ‘Foxglove’, donde Heynderickx utiliza imágenes botánicas para ilustrar la necesidad de lentitud en un entorno que lo rechaza. Mientras la guitarra construye un ritmo pausado y la voz repite ‘Oh daydream die slow’, la canción refleja un deseo de sostener las pequeñas cosas que se desvanecen con el tiempo. A lo largo del álbum, la naturaleza aparece como el refugio, con sus ciclos y sus símbolos, contrastando con la agitación tecnológica que interrumpe la conexión humana. Cada tema lleva consigo una suerte de resistencia pacífica a esta deshumanización.

En el corazón del álbum, la canción homónima, ‘Seed of a Seed’, muestra la esperanza de un futuro más simple. Heynderickx se aferra a deseos cotidianos—‘Maybe a glass of wine, maybe a hand next to mine’—como si con ello construyera una red de anhelos mínimos pero fundamentales. La sencillez de estos deseos no es trivial, sino que se convierte en una forma de protesta ante la presión de optimización constante, en un intento de recordar que la vida puede también construirse desde la calma.

Sin embargo, en ‘Mouth of a Flower’ el tono se torna más oscuro y complejo. Heynderickx explora una humanidad atrapada en un ciclo de consumo, donde incluso el colibrí, guardián de un bocado, participa en la voracidad del mundo. La reiteración de ‘we take and we take and we take’ enfatiza un sentir de voracidad que nos ha hecho perder la comunicación con otros seres y con nosotros mismos. Es una reflexión que recuerda a una sociedad en la que el exceso domina, pero la canción invita a detenerse y a observar cómo nuestras acciones tienen un eco.

La pieza más abiertamente melancólica, ‘Redwoods (Anxious God)’, rescata el anhelo por una época en que la relación con la naturaleza era más permeable. Al expresar ‘I’d do anything to hear the Redwoods talk’, Heynderickx captura el vacío que queda al perder contacto con el entorno natural. A medida que la letra describe un mundo en el que los teléfonos reemplazan el canto de los pájaros, emerge la percepción de que, al desconectar de la tierra, el ser humano se vuelve un fantasma en su propio hábitat.

A pesar de estas sombras, el álbum no abandona por completo la celebración de la vida cotidiana. ‘Sorry Fahey’, con su mención de elementos tan sencillos como una tetera y un viejo gato, presenta una visión de la adultez en la que lo pequeño y ordinario adquiere un significado que, en otra época, podría haber pasado inadvertido. La voz de Heynderickx adquiere una calidez que recuerda el valor de las tradiciones heredadas, aunque se expresen en gestos menores. Esta reafirmación de lo simple, sin la carga de expectativas de la vida moderna, parece trazar un camino hacia una paz resignada pero no complaciente.

Cierra el disco ‘Swoop’, una canción que vuelve a la idea de “arte en el día a día”, interrogando si en el acto cotidiano reside un tipo de creatividad que, sin ser perfecta, tiene su propio valor. Es un tema en el que la voz de Heynderickx suena especialmente introspectiva, dejando en el aire la posibilidad de que en las pequeñas despedidas y retornos se esconda algún tipo de arte que nos ayude a reconciliarnos con nuestras decisiones y con el tiempo que pasa.

‘Seed of a Seed’ es un álbum donde los conflictos internos y externos se entrelazan en armonía. Haley Heynderickx nos deja una obra que no pretende resolver las tensiones de la modernidad, sino acompañarnos en el proceso de entenderlas y, tal vez, aceptarlas.

Conclusión

‘Seed of a Seed’ retrata una serenidad buscada en un mundo de ruido, donde Haley Heynderickx recurre a imágenes botánicas y momentos simples para confrontar la incertidumbre contemporánea.

8.5

Álbum

Haley Heynderickx - Seed of a Seed

Artista

Haley Heynderickx

Año

2024

Discográfica

Mama Bird Recording Co.

Tratando de escribir casi siempre sobre las cosas que me gustan.