En el universo de la experimentación sónica, Ben Frost ha forjado una trayectoria inconfundible, marcada por su habilidad para fusionar paisajes distantes. Tras un septenio de relativa calma en el ámbito de los lanzamientos propios, el músico australiano afincado en Islandia ha decidido sacudir los cimientos con 'Scope Neglect', un álbum que desafía las convenciones y empuja los límites del metal a territorios insólitos.
A primera vista, el concepto de deconstruir las estructuras del metal progresivo puede parecer una empresa arriesgada. Sin embargo, Frost ha demostrado una vez más su destreza para transformar lo aparentemente convencional en una experiencia trascendental. En colaboración con el guitarrista Greg Kubacki de Car Bomb y el bajista Liam Andrews de My Disco, el productor ha creado un lienzo sónico donde los riffs destilados se convierten en bloques de construcción para un viaje inmersivo.
Desde el comienzo con 'Lamb Shift', nos sumergimos en un vacío cargado de tensión, donde los fragmentos de guitarras distorsionadas se entretejen con el silencio de manera desconcertante. Los espacios vacíos adquieren una presencia casi táctil, obligándonos a prestar atención a los detalles más sutiles. Esta sensación de discontinuidad se intensifica en 'Chimera', donde los golpes tectónicos y las capas de drones se unen a los riffs disonantes, creando una atmósfera oscilante que evoca la incertidumbre.
A medida que avanzamos, nos encontramos con momentos de belleza cruda entrelazados con el caos. 'The River of Light and Radiation' es un claro ejemplo, con sus ritmos pulverizantes y texturas electrónicas que evocan un paisaje alienígena. Frost demuestra su habilidad para generar tensión a través de la yuxtaposición, dejándonos en un estado de anticipación constante.
Aunque 'Scope Neglect' puede parecer un ejercicio de deconstrucción en su superficie, hay una narrativa subyacente que se revela gradualmente. Piezas como 'Turning the Prism' y 'Tritium Bath' exploran los contrastes entre lo agresivo y lo etéreo, creando momentos de belleza incómoda que desafían nuestras expectativas.
A lo largo de su discografía, Frost ha demostrado una habilidad única para manipular el sonido, y 'Scope Neglect' no es una excepción. Cada elemento, desde los zumbidos electrónicos hasta los gruñidos de las ballenas, se combina de manera magistral, creando una experiencia inmersiva y cautivadora.
No obstante, sería ingenuo esperar que 'Scope Neglect' sea un álbum fácilmente digerible. Frost no busca complacer al oyente casual, sino sumergirlo en un viaje sónico desafiante y contemplativo. Hay momentos en los que la intensidad puede resultar abrumadora, mientras que en otros instantes, la quietud puede generar cierta inquietud.
'Scope Neglect' es una obra que desafía las expectativas y empuja los límites de lo que se considera música. Es un testimonio del compromiso de Ben Frost con la exploración artística y su capacidad para transformar lo conocido en algo completamente nuevo. Aunque no todos los oyentes pueden conectar con su visión, aquellos dispuestos a sumergirse en sus profundidades encontrarán una experiencia profundamente gratificante y transformadora.
Conclusión
Conclusion
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.