Review

Youth Lagoon - Rarely Do I Dream

Youth Lagoon

2025

8.2


Por -

En ocasiones, lo que llamamos memoria no es más que un montaje de escenas inconexas que reordenamos según el capricho del presente. Las imágenes borrosas de una cámara doméstica, los sonidos distorsionados por el paso de los años, el eco de risas lejanas que ya no sabemos si fueron reales o simplemente un truco de la mente. En 'Rarely Do I Dream', Youth Lagoon abraza esa condición de la memoria: no como un archivo fiable, sino como un material maleable, susceptible de ser manipulado y convertido en otra cosa.

El hallazgo de viejas grabaciones caseras en el sótano de su infancia no es solo el detonante del disco, sino su espina dorsal. La voz de un Trevor Powers niño se intercala con la del adulto que hoy reinterpreta esas escenas con nuevos matices. Su narrativa se mueve en un espacio intermedio, donde lo biográfico se entremezcla con lo imaginario. Si en discos anteriores Youth Lagoon había explorado la nostalgia desde la textura del sonido, aquí la nostalgia es un personaje más, hablándole al oyente desde las rendijas de una cinta de video.

Desde los primeros compases de 'Neighborhood Scene', el oyente es transportado a un espacio que no es ni el pasado ni el presente, sino un intersticio donde ambos coexisten. Las voces infantiles y la percusión marcan el ritmo de una historia que parece desarrollarse dentro de una película casera proyectada en bucle. Sin embargo, lejos de ser un ejercicio de melancolía simple, el tema se abre paso entre sintetizadores y una base rítmica que sugiere movimiento, como si el recuerdo no fuera estático, sino una carretera que seguimos recorriendo.

A lo largo del disco, Powers cambia de registro con facilidad, alternando entre la contención y la grandilocuencia. 'Speed Freak' apuesta por una estructura más agresiva, con un bajo sintetizado que pulsa con insistencia, mientras que 'Perfect World' se adentra en un ruido casi onírico, donde las guitarras distorsionadas se despliegan como una tormenta eléctrica. 'My Beautiful Girl', en cambio, reduce todo a su mínima expresión: una melodía delicada, sostenida en una interpretación vocal frágil, casi rota.

Uno de los elementos que unifica el álbum es el uso de las grabaciones caseras no solo como un recurso atmosférico, sino como un pilar compositivo. 'Lucy Takes a Picture' juega con este recurso, entrelazando las voces del pasado con un piano y una base rítmica que recuerda al trip-hop más contenido. 'Gumshoe (Dracula From Arkansas)', por su parte, introduce una sección de cuerdas en medio de su cadencia casi jazzística, añadiendo una capa de extrañeza que realza su carácter cinematográfico.

El cierre del disco, 'Home Movies (1989-1993)', encapsula toda la propuesta de 'Rarely Do I Dream'. Más que una canción, es un collage de sonidos extraídos de las cintas originales, sostenido por una base instrumental minimalista. En lugar de ofrecer un desenlace, el tema deja flotando una sensación de suspensión, como si la historia no terminara aquí, sino que siguiera reproduciéndose fuera del alcance del oyente.

Trevor Powers no entrega una crónica fiel de su infancia, sino una reconstrucción libre, un juego con el tiempo y sus caprichos. 'Rarely Do I Dream' no es un ejercicio de nostalgia, sino una exploración de cómo el pasado se filtra en el presente y lo transforma. Cada escucha revela nuevos matices, como una cinta de video desgastada que, con cada reproducción, muestra imágenes que no recordábamos haber visto antes.

Conclusión

Youth Lagoon entrega en 'Rarely Do I Dream' un disco que no busca nostalgia fácil, sino la reconstrucción de una memoria moldeada por el tiempo y la imaginación. Entre audios de la infancia y texturas electrónicas, Powers abre una ventana a un mundo que solo existe en la intersección entre lo vivido y lo soñado.

8.2

Álbum

Youth Lagoon - Rarely Do I Dream

Artista

Youth Lagoon

Año

2025

Discográfica

Fat Possum

Tratando de escribir casi siempre sobre las cosas que me gustan.