Review

Coldplay - Moon Music

Coldplay

2024

2


Por -

En ‘Moon Music’, Coldplay intenta capturar la inmensidad del cosmos, pero el resultado es un trabajo sin dirección clara. El álbum, que se plantea como una continuación de ‘Music of the Spheres’, persigue una narrativa de esperanza y amor en tiempos de adversidad, pero cae en el cliché y la superficialidad. Desde sus primeras notas, la búsqueda de algo trascendental parece más una excusa para ofrecer un conjunto de canciones recicladas, donde los destellos instrumentales tratan de ocultar la carencia de ideas frescas.

El inicio del disco, con la canción homónima, sugiere una narrativa introspectiva que nunca llega a desarrollarse. La línea ‘Once upon a time, I tried to get myself together’ no ofrece más que una vaga promesa de redención personal que se diluye en una producción orquestal excesiva. Lo que podría haber sido un momento íntimo, se convierte en una capa más de la grandilocuencia característica de la banda en sus últimos trabajos. La instrumentación, aunque elaborada, no logra disimular las limitaciones líricas de Martin, cuyas reflexiones sobre el amor y la vida parecen haber alcanzado un estancamiento creativo.

Canciones como ‘feelslikeimfallinginlove’ representan perfectamente el agotamiento de ideas que atraviesa el álbum. A pesar de sus intentos por crear una sensación de euforia amorosa, la canción se siente genérica, con letras que bordean lo caricaturesco: ‘It feels like I’m falling in love / Maybe for the first time’. La ambigüedad del mensaje y la falta de profundidad en la interpretación convierten lo que debería ser un clímax emocional en un momento banal, carente de cualquier impacto real. La producción pulida y los coros grandilocuentes hacen que la canción se perciba más como una fórmula repetida que como un intento genuino de innovar.

La colaboración con artistas como Little Simz y Burna Boy en ‘We Pray’ añade diversidad sonora, pero no consigue elevar el contenido lírico. La canción, que pretende ser un himno de unidad y resistencia, se pierde en sus pretensiones de grandeza. Los versos de Martin no ofrecen más que una amalgama de metáforas huecas, reforzando la desconexión entre la intención y la ejecución. Además, la participación de estos artistas se siente desaprovechada, integrándose en un marco musical que no les permite destacar.

Otro de los temas del álbum, ‘Jupiter’, pretende abordar cuestiones profundas sobre la identidad y la libertad personal, pero lo hace de manera torpe. Las letras, que tratan sobre una mujer que lucha contra las expectativas sociales, son una combinación de tópicos y lugares comunes: ‘I love who I love’. Lo que debería ser un himno de empoderamiento queda reducido a una serie de consignas vacías, acompañadas de una instrumentación que tampoco aporta innovación.

En términos de producción, Coldplay sigue confiando en elementos grandilocuentes que, lejos de aportar originalidad, refuerzan la idea de que la banda ha dejado de arriesgarse. Canciones como ‘Good Feelings’ están cargadas de arreglos que parecen diseñados para funcionar en grandes estadios, pero no logran comunicar nada más allá de un optimismo forzado. Las líneas como ‘Don’t ever forget those good feelings’ parecen sacadas de un manual de autoayuda, más que de una reflexión honesta sobre la complejidad de las emociones humanas.

El uso de símbolos como el título de la canción ‘Alien Hits / Alien Radio’, así como la inclusión de fragmentos de discursos de Maya Angelou, parecen intentos de dotar al álbum de una dimensión filosófica que nunca se materializa. Estos elementos resultan forzados, casi decorativos, y no consiguen aportar el peso emocional que pretenden. El álbum está plagado de estos gestos vacíos que, en lugar de añadir significado, subrayan su falta de originalidad.

Hacia el final del álbum, con temas como ‘All My Love’, el agotamiento creativo se vuelve aún más evidente. La balada, que se presenta como un momento de vulnerabilidad, se siente artificial en su lirismo, con frases que rozan lo paródico: ‘Whether it rains or pours, I’m all yours’. El intento de transmitir una emoción sincera queda ahogado por la acumulación de clichés y una producción exagerada, diseñada para provocar una respuesta emocional que nunca llega.

‘Moon Music’, en su conjunto, refleja una banda que ha perdido el rumbo creativo, aferrándose a fórmulas seguras y a una producción brillante que oculta la falta de contenido genuino. Coldplay, que una vez fue capaz de combinar lo emocional con lo épico, parece ahora atrapado en un ciclo de repetición, ofreciendo un producto que, aunque reluce en la superficie, carece de profundidad y originalidad. El álbum, en lugar de ser un paso adelante en su carrera, se siente como un eco distante de lo que alguna vez fueron.

Conclusión

Coldplay entrega en ‘Moon Music’ un álbum que intenta ser celestial pero resulta vacío, con letras pobres y un enfoque sonoro que prioriza la grandilocuencia sobre el contenido emocional que pueda tener un mínimo de calado.

2

Álbum

Coldplay - Moon Music

Artista

Coldplay

Año

2024

Discográfica

Parlophone

Tratando de escribir casi siempre sobre las cosas que me gustan.