Review

Cross Record - Crush Me

Cross Record

2025

8.2


Por -

Difícilmente puede hablarse de una obra como 'Crush Me' sin detenerse antes en lo que la sostiene. No es una colección de canciones elaboradas con un plan preconcebido, ni una obra que haya transitado un camino recto hacia su forma final. La idea de estructura se encuentra desplazada desde el primer momento. Todo lo que ocurre en el disco nace de una acumulación irregular de momentos interrumpidos, de grabaciones dispersas, de decisiones tomadas en una atmósfera inestable. No es accidental que muchas de las capas que atraviesan estas canciones provengan de intentos incompletos, de registros esqueléticos que apenas sugerían lo que acabarían siendo. La voz, como punto de anclaje, aparece y desaparece, se distorsiona, se filtra, se abandona. En ningún caso pretende guiar.

El trabajo de Cross Record parece fundado en una tensión permanente entre control y entrega. El resultado de esa oscilación no es una síntesis, sino una zona intermedia donde nada acaba de afirmarse. Hay una percepción del cuerpo disuelto, de las emociones ya sin forma, de la identidad como algo transitorio. El sonido, lejos de estabilizar, activa este estado. Desde los primeros compases de 'Rolling Backwards', se percibe una insistencia en el corte, en el desvío. Las percusiones se arrastran como si buscaran una dirección que nunca llega a definirse. En 'Charred Grass', la frase “I feel real” no se lanza al oyente como afirmación, sino como un eco de algo que intenta sostenerse sin conseguirlo.

En 'Dorset Area of Natural Beauty', la voz queda parcialmente enterrada bajo un tejido sonoro quebrado, mientras la narración de un entorno supuestamente idílico se va deformando. “Fire so hot and nice, burns out my insides” aparece como constatación de una belleza invasiva, que erosiona en lugar de calmar. Los elementos naturales no ofrecen refugio, sino un paisaje saturado de señales que interrumpen cualquier noción de estabilidad. Incluso el teléfono móvil —presente como un instrumento de sobrecarga más que de conexión— se convierte en agente de fragmentación, justo antes de que un coche destruya lo que podría haber sido un vínculo mínimo con la realidad.

A lo largo del álbum, las repeticiones funcionan como marcas de obsesión más que de insistencia estilística. En 'Cutting a Cake', los versos giran sobre sí mismos, no para enfatizar un significado, sino para señalar un estado de encierro. “It’s peace, to feel / It’s pressure, it’s touch, it’s care” se presenta como una secuencia sin resolución, atrapada entre conceptos que se anulan mutuamente. Aquí, los sonidos no acompañan al texto; lo rodean, lo deforman, lo presionan hasta que apenas es reconocible. La percusión se vuelve fragmentaria, nerviosa, como si intentara sostener un equilibrio que nunca se alcanza.

El disco también propone momentos donde esa presión cede, pero lo hace sin establecer una dirección clara. 'Led Through Life' opera bajo una lógica flotante: la voz parece suspendida sobre una base tenue, como si hablara desde un punto fuera del cuerpo. No hay deseo de retorno, solo un tránsito sin guía. Esta suspensión se rompe en 'God Fax', un corte donde se condensa una ansiedad convertida en forma. Las respiraciones entrecortadas, los efectos vocales que desfiguran la entonación original y la masa sonora que se acumula en oleadas crean una sensación de colapso progresivo. “I am calm in the absence of reason” no llega como consuelo, sino como simulacro de control. La calma no está presente; se intenta fabricar a través de la repetición.

A medida que se avanza en el disco, los pasajes adquieren un carácter más ceremonial, no en términos espirituales, sino como actos de entrega. El tema que da título al álbum funciona como punto de inflexión. “Godly foot, crush me” es pronunciado sin urgencia ni clamor. No hay rastro de resistencia. El impacto no se teme, se espera. No es una súplica, sino una aceptación de la disolución como único gesto posible. La música acompaña este momento con un minimalismo calculado: no hay explosión, ni catarsis, solo una continuidad opaca que absorbe lo anterior.

'Twisted Up Fence' clausura el disco con una imagen deformada de lo cotidiano. La canción se organiza en torno a objetos impregnados de memoria, presentados sin nostalgia ni afectación. “You say it’s an endless abyss / And I say the abyss is the best” podría interpretarse como conclusión, pero funciona más como desvío. El álbum no cierra; se diluye. Se repliega sin dejar marca firme. Si en algún momento existió una narración, ésta ha sido cancelada.

Cross Record no organiza en 'Crush Me' un relato, sino un desplazamiento. La linealidad desaparece, sustituida por una constelación de fragmentos donde nada se ordena ni se explica. La música se mantiene en un estado de latencia, siempre al borde del derrumbe. Todo lo que emerge lo hace con una forma inestable, propensa a volver a caer. El álbum no se dirige hacia ningún lugar. Solo persiste.

Conclusión

‘Crush Me’ se articula como una colección dispersa de recuerdos somáticos que Cross Record encapsulan con mínima ornamentación. Cada tema parece suspendido entre el colapso y la reorganización de la conciencia.

8.2

Álbum

Cross Record - Crush Me

Artista

Cross Record

Año

2025

Discográfica

Ba Da Bing

Tratando de escribir casi siempre sobre las cosas que me gustan.