Con su nuevo álbum I Killed Your Dog, la artista estadounidense Taja Cheek, más conocida como L'Rain, nos invita a adentrarnos en un inquietante pero fascinante viaje sonoro que evapora géneros y trasciende lo convencional.

Grabado entre Los Ángeles y Nueva York junto a sus fieles colaboradores Andrew Lappin y Ben Chapoteau-Katz, este tercer disco de estudio supone una evolución con respecto a sus laureados trabajos anteriores, explorando nuevos territorios pero manteniendo su esencia experimental, ecléctica y evocadora.

El intrigante título parece presagiar una experiencia oscura y turbulenta. Y ciertamente hay momentos de intensidad y extrañeza a lo largo de la escucha. No obstante, el álbum abarca una extensa gama de texturas, dinámicas y emociones, transitando con soltura de la ensoñación al estruendo.

Canciones como ‘Our Funeral’ y ‘Uncertainty Principle’ destilan desasosiego y congoja. Capas de sintetizadores, drones espectrales y la voz procesada de Cheek se confabulan para crear una atmósfera de desolación y ansiedad que estalla finalmente en ruido industrial.

En contraste, temas como ‘Knead Bee’ y ‘New Year's UnResolution’ rezuman calidez y sensualidad. Sobre fondos de teclados cristalinos y cadencias dub, la cantante despliega melodías sedantes y letras intimistas donde se dirige a su yo del pasado. El hipnótico groove de estas canciones incita al baile y la introspección.

La diversidad estilística del disco queda patente en cortes como ‘5 to 8 Hours a Day (WWwaG)’, que comienza como una delicada balada folk para derivar en una arrolladora explosión de jazz progresivo. O la psicodélica ‘Pet Rock’, cuyas envolventes guitarras remiten al indie-pop de inicios de siglo.

Igualmente destacables son las breves piezas intercaladas que aportan momentos de humor, experimentación sonora y absurdez al conjunto. Desde grabaciones telefónicas sampling hasta coros infantiles otorgan un toque lúdico y espontáneo.

Líricamente, L'Rain explora temas como relaciones rotas, confusión emocional y cambios vitales desde una óptica críptica y surrealista. Abundan las imágenes poéticas, pero sin perder de vista la universalidad de los sentimientos. Por ejemplo, en ‘I Killed Your Dog’ canta: "I felt so sick, one million sighs Licked the body as I cried’. Una inquietante metáfora sobre culpabilidad y pérdida.

En definitiva, I Killed Your Dog es una rareza maestra, repleta de hallazgos y matices. L'Rain demuestra tener una voz propia dentro de la música actual, combinando vanguardia y accesibilidad. Un álbum ambicioso y estimulante que conectará sin duda con los amantes del pop alternativo y la experimentación sonora.