Tras más de cinco años de silencio discográfico, la banda madrileña Nudozurdo regresa con fuerza con Clarividencia, un álbum que marca su inspirado retorno a la primera línea de la música independiente española. Con Leo Mateos al frente, el grupo demuestra nuevamente ser uno de los proyectos más personales y arrolladores de la escena nacional.

Desde el intenso corte que inaugura el disco, 'Soledad/Clarividencia', queda claro que Nudozurdo retoma el testigo justo donde lo dejó, con su característica propuesta entre el post-punk y el post-rock. Su sonido envolvente y ligeramente inquietante es distintivo. No obstante, en esta nueva entrega se aprecian también matices novedosos, con canciones algo más cercanas al pop y una mayor presencia de estribillos memorables.

Temas como la emocionante 'Carta a Nina' revelan nuevamente la capacidad del grupo para llegar al oyente con letras abiertamente sinceras y desprovistas de artificios. La voz desgarrada de Leo Mateos transmite con honestidad oscuras emociones universales con las que es fácil conectar. Esta búsqueda de proximidad no se opone a la experimentación sonora, como evidencian cortes kraut-rockeros como 'Bisontes albinos' o la inquietante 'Lo que ocultan las arizónicas'.

A lo largo de las diez canciones del disco se suceden pasajes luminosos y rincones más sombríos, ambientes expansivos junto a momentos de intimidad. Posiblemente haya contribuido a enriquecer esta variedad tímbrica la labor tras las perillas de un prestigioso productor como Paul Corkett, cuyas credenciales incluyen colaboraciones con pesos pesados como The Cure.

La poética críptica de las letras, otra seña de identidad del grupo, alcanza cotas notables en este trabajo a través de imágenes sugerentes que evocan realidades alternativas. Jardines encantados, llantos de delfines o la extraña simbología de 'La isla del diablo' configuran un imaginario personal tan rico como el de cualquier buen autor de ficción fantástica.

A nivel compositivo, Nudozurdo factura aquí algunas de sus mejores canciones hasta la fecha. La monumental 'Crevillente / La industria del sueño', la abrasiva 'Elvira / Santuario combate' o la mencionada 'La isla del diablo' pueden codearse sin desmerecer con clásicos previos del grupo como Sintética o Tara Motor Hembra.

Para redondear aún más la propuesta, la edición en vinilo incluye como bonus tracks dos pequeñas joyas: el single 'Angel Genetics', que fue adelanto de este regreso tan esperado, y la áspera 'La bruja'. Ambos cortes confirman que Nudozurdo ha vuelto para quedarse y situarse de nuevo en la primera línea de la siempre efervescente escena musical nacional.

Tras escuchar con atención las diez piezas de Clarividencia, solo cabe rendirse a la evidencia: los de Leo Mateos siguen explorando un territorio propio y nos entregan una obra maestra contemporánea, radical en su planteamiento underground pero de calado universal. Un álbum conceptual que invita a sumergirse en los densos mundos interiores del músico. Sin complacencias ni falsos espejismos.