Martin Scorsese ha rendido homenaje al recientemente fallecido Rob Reiner mediante un ensayo publicado en The New York Times, en el que recuerda su amistad y valora su legado artístico. En el texto, el director expresa su pesar por la pérdida de Rob y de su esposa, Michele, ambos hallados sin vida el 14 de diciembre en su casa de Brentwood. Su hijo, Nick Reiner, ha sido detenido acusado de asesinato.

Scorsese rememora sus primeros encuentros con Reiner en Los Ángeles a comienzos de los años setenta, en reuniones de artistas y humoristas organizadas por George Memmoli. Destaca el humor afilado y la calidez del cineasta, al que describe como alguien capaz de disfrutar intensamente de cada momento. También recuerda su célebre carcajada durante un homenaje en el Lincoln Center, símbolo de su carácter libre y entusiasta.

El autor de Taxi Driver subraya su admiración por Misery, dirigida por Reiner, a la que califica de película excepcional, y define This Is Spinal Tap como una obra sin equivalente dentro de la comedia cinematográfica. Además, rememora su experiencia al dirigir a Reiner en The Wolf of Wall Street, donde interpretó al padre del protagonista, destacando su precisión interpretativa y su comprensión del conflicto moral del personaje.

Scorsese concluye su tributo evocando la humanidad y el sentido vitalista de su amigo, a quien seguirá recordando como un referente personal y profesional. Su texto cierra con una imagen de reencuentro imaginario, reflejo de la huella que Reiner deja en quienes lo conocieron.