La industria del entretenimiento sufre una pérdida irreparable tras el fallecimiento de Kelley Mack, intérprete que conquistó a la audiencia con su participación en la exitosa serie post-apocalíptica 'The Walking Dead'. La actriz, nacida como Kelley Klebenow, perdió la vida el pasado sábado en su Cincinnati natal a los 33 años de edad, tras una valiente batalla contra un glioma del sistema nervioso central que afectaba su médula espinal y cerebro.
Durante su trayectoria profesional, Mack acumuló un impresionante curriculum que incluía 35 créditos como intérprete y cinco como productora. Su versatilidad artística la llevó a brillar en múltiples formatos audiovisuales, destacando especialmente por su interpretación del personaje Addy en la novena temporada de 'The Walking Dead', además de encarnar a Penelope Jacobs en la octava entrega de 'Chicago Med' y participar en '9-1-1'.
Su compañera de reparto Alanna Masterson expresó públicamente su orgullo por haber compartido pantalla con ella en su último episodio conjunto. La artista también desarrolló una exitosa carrera en publicidad, prestando su talento a marcas reconocidas como Dr. Pepper, Ross stores, Dairy Queen y Chick-fil-A. Su formación académica en cinematografía por Chapman University complementó perfectamente su pasión natural por la narración audiovisual.