La película 'Robo' (2024), dirigida por la debutante realizadora Elle Márjá Eira, es una adaptación de la aclamada novela homónima de Ann-Helen Laestadius. La cinta se sumerge de lleno en la realidad de la comunidad indígena Sami, cuya lucha por preservar su identidad y formas de vida tradicionales se ve constantemente amenazada por las fuerzas de la sociedad dominante sueca.

Desde el inicio, 'Robo' establece un tono sobrio y reflexivo, transportando al espectador a los gélidos paisajes del norte de Suecia, donde la belleza natural del entorno contrasta abruptamente con la dura realidad que enfrentan los protagonistas. La película sigue a Elsa, interpretada convincentemente por Elin Kristina Oskal, quien de niña presenció el brutal asesinato de su querido ternero de reno. Este incidente traumático marca un punto de inflexión en su vida, dejándole una herida que se mantendrá abierta a lo largo de la narración.

A medida que avanza la trama, vemos cómo Elsa, ahora convertida en maestra de escuela, continúa lidiando con los estragos que el constante robo y la matanza de los renos de su comunidad han causado. La joven se debate entre su deseo de integrarse a la sociedad sueca dominante y su necesidad de defender la herencia cultural Sami, una lucha interna que la enfrenta no solo con la hostilidad de sus vecinos, sino también con la reticencia de los propios líderes de su pueblo, quienes prefieren una aproximación más diplomática y conciliadora.

Uno de los logros más notables de 'Robo' es su capacidad para transmitir la riqueza y complejidad de la cultura Sami sin caer en la sobreexplicación o el didactismo. A través de detalles sutiles y bien observados, la película nos sumerge en las tradiciones, costumbres y modos de vida de esta comunidad, permitiéndonos apreciar su profunda conexión con la tierra y los renos, animales que no solo son su medio de subsistencia, sino también una extensión de su propia identidad.

La cuidadosa dirección de Elle Márjá Eira, acompañada por una sobresaliente fotografía a cargo de Ken Are Bongo, logra plasmar de manera magistral la belleza y la aspereza del entorno, convirtiendo los paisajes nevados en un personaje más de la narración. Asimismo, la banda sonora compuesta por Marta Teren aporta una atmósfera envolvente y evocadora, subrayando los altibajos emocionales de los personajes.

Si bien la trama de 'Robo' se encuadra dentro de las convenciones del drama y el thriller, la cinta se desmarca de los clichés al priorizar un enfoque más introspectivo y reflexivo. En lugar de centrarse en un arco de venganza simplista, Eira y el guionista Peter Birro optan por profundizar en los dilemas internos de Elsa y la comunidad Sami, explorando las tensiones, frustraciones y desafíos que enfrentan en su lucha por preservar su identidad y forma de vida.

Uno de los aspectos más destacables de la película es la forma en que aborda las complejidades inherentes a esta lucha. No hay villanos unidimensionales ni héroes sin fisuras; en su lugar, encontramos personajes que navegan en una zona gris, cuyas motivaciones y acciones se mueven entre la defensa legítima de sus derechos y la adopción de métodos cuestionables. Esta ambigüedad moral enriquece la narrativa y evita simplificaciones, acercándose a una representación más auténtica y matizada de los conflictos que enfrentan las comunidades indígenas.

Asimismo, la película no se limita a explorar las tensiones entre los Sami y la sociedad sueca dominante, sino que también ahonda en las divisiones y desafíos internos de la propia comunidad Sami. A través de personajes como el hermano de Elsa, Mattias, y su amigo Lasse, la cinta aborda cuestiones como la salud mental, las diferencias generacionales y la presión por mantener las tradiciones, mostrando cómo estos factores también contribuyen a la compleja realidad que enfrenta este pueblo.

Si bien el ritmo narrativo de 'Robo' puede resultar lento y contemplativo para algunos espectadores, este estilo deliberado se alinea con la naturaleza misma de la trama, que se mueve a la par de las lentas pero constantes transformaciones que afectan a la comunidad Sami. La película no busca generar momentos de tensión y acción dramatizada, sino más bien sumergirnos en la cotidianidad y las luchas diarias de estos personajes, invitándonos a reflexionar sobre las implicaciones más profundas de su situación.

'Robo' se alza como una propuesta cinematográfica de gran relevancia y urgencia, que logra trascender las fronteras geográficas y culturales para presentar una historia universal sobre la lucha de los pueblos indígenas por preservar su identidad y modo de vida en un mundo cada vez más homogeneizado. La cuidadosa dirección de Elle Márjá Eira, el impactante desempeño de su elenco y la riqueza narrativa de la adaptación de la novela de Ann-Helen Laestadius, convierten a esta película en una obra de gran trascendencia que merece ser ampliamente reconocida y discutida.