Speedy Ortiz se encuentran a las puertas de dar comienzo a su esperadísima gira por nuestro país con el objetivo de presentarnos su más reciente LP Rabbit Rabbit y de paso rendir culto a su LP debut que hace unos meses cumplió 10 años. Adentrándonos en su más reciente LP nos encontramos ante una obra que supone un punto de inflexión lírico y emocional en la carrera de la banda liderada por Sadie Dupuis. Aprovechando el período de introspección que la pandemia propició, la artista se atreve por primera vez a trazar con su singular pluma referencias directas al abuso infantil que sufrió y afronta sus secuelas. Esta introspección tan descarnada dota a temas como ‘Who’s Afraid of the Bath’ de un escalofrío sobrecogedor. Dupuis relata con gélida monotonía las precauciones ante un malhechor conocido, alertando de perpetradores que campan a sus anchas. En la tensísima ‘Cry Cry Cry’ se enfrenta a sus dificultades para sentirse segura llorando, entre un tumulto contrapuntístico de guitarras y siniestros sintetizadores. Las habitualmente crípticas letras de Dupuis adquieren ahora un halo de desesperado salvavidas en este ejercicio de cordura compartida. Disecciona con demoledora lucidez las dinámicas destructivas y de abuso de poder, tanto en la industria musical como en vínculos personales. Por su parte, ‘Scabs’ es una crítica mordaz a quiénes traicionan ideales por puro oportunismo. ‘Plus One’ destripa una relación manipuladora mediante un imaginativo simbolismo de rompecabezas y lluvia ácida. Incluso su descripción casi bucólica del barrio en ‘Kitty’ destila la tensión de pesadillas recurrentes tras una aparente calma hogareña. Aprovechando lo inminente de estos conciertos, Sadie, Andy, Audrey y Joey nos desvelan sus temas imprescindibles.

Una canción ideal para el invierno

Andy: la primera canción del álbum Winter Hymn Country Hymn Secret Hymn siempre me ha parecido realmente invernal. Espaciosa, abierta, hermosa... como si estuviera en un prado helado viendo una bandada de pájaros aterrizar en medio del campo. Me hace sentir el mismo tipo de calma y paciente quietud que una fuerte nevada. Me gusta mucho la música que me permite desconectar el cerebro e ir a un lugar diferente, y ésta me devuelve al momento en que la escuché por primera vez, que fue en el invierno de 2006.

Una canción para pasar horas en la furgoneta

Audrey: me gusta mucho escuchar música hecha por Vocaloid en los viajes largos, porque incluso en un viaje nocturno o durante la hora 5 de un gran día de viaje, golpea una parte de mi cerebro que me hace sentir que todo irá bien. Creo que es una de las canciones más divertidas de todos los tiempos. La interacción entre las dos informáticas es tan natural y desenfadada, y el estribillo es una auténtica bofetada. Me ha ayudado a superar muchos días agotadores.

Una canción para una boda

Audrey: una vez fui a una boda en la que esta fue la última canción de la noche, y fue un éxito de baile trascendental y agridulce. Por un lado, todos tus amigos están allí contigo por una noche, ¡y eso es precioso! Pero por otro lado, tienes en la cabeza que estás en un momento de transición en el que puede que sea la última vez que tu dinámica social es la que es, y las cosas podrían cambiar cuando te levantes al día siguiente. Nos miramos a los ojos mientras nos partíamos el culo.

Una canción para pasar un domingo de resaca

Sadie: el tiempo a solas aliviará esta resaca. Abraza el dolor de frente con el riff retorcido y el feedback selecto de este proyecto en solitario de Portland, Oregón. Es ruidoso y dulce, con rellenos saturados de cinta que unen armonías atonales forjadas a partir del instrumento que lleva la voz cantante. Espero que hayas pasado una gran noche de sábado.

Una canción que nunca versionarías

Andy: la razón por la que nunca versionaré esta canción es porque Devo ya hizo la versión perfecta. De hecho, creo que la canción de Devo es mejor que la original. Me encantan las versiones que conservan el espíritu de la canción original al tiempo que cambian los arreglos y el ambiente general, y creo que Devo me gusta mucho más como grupo, así que su versión siempre será mi preferencia. Por lo tanto, nunca la adaptaré, porque creo que ya se ha hecho perfectamente.

Una canción para pasar un día en el campo

Joey: grabaciones de campo de pájaros piando, campanarios lejanos sonando y escolares cantando acompañan las hipnóticas piezas de piano de Astley. ¿Quién necesita el campo cuando puedes ponerte esta canción en tu apartamento falto de luz?

Una canción ideal para una película de terror

Sadie: en el espíritu de las películas de terror no espeluznantes con indie rock (guiño guiño a Scream 2), voto por este tema de Thao y su crujiente ritmo de batería, su bajo propulsivo y su divertido gancho vocal. Puede sonar irónica en medio de una carnicería ("actuamos como si nadie muriera"... ¡pero el asesino tiene otras ideas!) o ser de lo más sincera cuando los supervivientes del slasher dicen basta y se cargan a la bestia final en un sangriento tercer acto.

Una canción romántica

Audrey: ¿tenían Blur la intención de que esta fuera una canción de campamento, a la vez afirmativa sobre el amor queer/trans y encontrar un lugar para ti mismo en él sin importar lo raro que seas? Probablemente no, pero siguiendo los escritos de José Esteban Muñoz sobre la desidentificación con el arte mayoritario, yo personalmente la reivindico como tal. Nadie puede impedirme hacerlo conmovedor aunque sea muy desordenado.

Una canción para motivarte antes de salir al escenario

Andy: Speedy Ortiz utilizó esta canción como nuestra música de entrada (y salida) durante toda nuestra gira por EE.UU. en 2023, y además de hacerme reír cada vez, ¡me animó de verdad para tocar nuestro set! Qué canción tan intensa escribió nuestro pequeño. Este chico, simplemente lleno de intensidad. ¿Por siempre se mostró tan serio?

Una canción que representa la felicidad

Joey: últimamente escucho mucha música ambiental, pero nada es tan inmediatamente delicioso como 'CREEK', la primera canción del álbum GREEN. La he escuchado cientos de veces en los últimos años. Tonos de sintetizador estimulantes y relajantes a partes iguales, arpegios juguetones y profundos. Lo mejor de todo es que no hay palabras.