Entrevistamos a

PUP

"Nosotros nos tomamos muy en serio nuestro trabajo, pero no a nosotros mismos, así que siempre buscamos ese equilibrio entre lo absurdo y lo emocional. "



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Una sala pequeña, el aire cargado y la electricidad circulando entre cables viejos y parches mal pegados. Algo así se siente ‘Who Will Look After The Dogs?’, un disco que PUP lanzan sin buscar amortiguar ningún golpe. Las canciones no se sopesan ni se perfeccionan: se lanzan, se rompen en el aire, se estampan contra quien escucha. Frente a un mundo que parece sostenerse a duras penas, el grupo opta por no fingir control ni serenidad. Lo que queda es la necesidad urgente de seguir tocando juntos como si cada ensayo pudiera ser el último. 'No Hope' marca la primera embestida: empieza sin tregua, como un portazo que nadie se molesta en disimular. Después, ‘Olive Garden’ y ‘Four Chords’ rasgan sin remordimientos la nostalgia y la frustración acumulada. Cada línea vocal de Stefan Babcock parece extraída de la garganta sin filtrar, y la sección rítmica no concede respiro en ningún compás. Lejos de buscar consuelo, canciones como 'Hallways' y 'Hunger For Death' desmontan la memoria sentimental con crudeza seca.

En lugar de buscar una pulcritud inerte, PUP graban el álbum de la forma más directa posible, con John Congleton empujándoles a no repetir tomas innecesarias y abrazar el fallo como parte del tejido real. 'Paranoid' desborda violencia controlada, mientras que 'Get Dumber' captura a la banda en uno de sus momentos más sucios y vivos. La recta final, con 'Best Revenge' y 'Shut Up', deja un eco donde la aceptación no llega como redención sino como resultado inevitable de seguir adelante. 'Who Will Look After The Dogs?' suena como si PUP hubieran encontrado, en medio del desastre, una manera de seguir siendo ellos mismos, más directos, más desafiantes y más ruidosos que nunca. Aprovechando lo inminente de este lanzamiento y su próxima gira por nuestro país, hemos tenido el placer de hablar con su guitarrista Steve.

El primer tema del disco transmite una declaración muy potente, sin espacio para la esperanza o el consuelo. ¿Por qué sentisteis que 'No Hope' debía ser la primera canción del álbum?

Cuando terminamos de grabarlo y empezamos a organizar el orden, nos dimos cuenta de que 'No Hope' era muy inmediata: empieza el ruido los platos de la batería y de golpe entra todo. Era una canción muy impactante, pedía atención desde el primer segundo, como lo que comentas. Siempre hemos querido que el primer tema sea fuerte, como hicimos en discos anteriores con temas como 'If This Tour Doesn't Kill You, I Will' seguido de 'DVP', o 'Morbid Stuff' empezando con 'Kids'. Esta canción tenía esa misma energía, pero de una forma distinta: más breve, más cruda, muy directa. No encajaba en otro sitio, tenía que ir al principio. A veces las canciones simplemente "deciden" su lugar.

 

Además, el álbum tiene una estructura emocional muy marcada: al principio transmite rabia, luego algo de caos, y hacia el final, cierta claridad. ¿Pensasteis en esta estructura desde el inicio o surgió de manera natural al ordenar los temas?

Fue bastante natural. Cuando Stefan escribía las letras, se dio cuenta de que cada canción hablaba de relaciones distintas: consigo mismo, con sus amigos y familia, o con parejas. Y al ver el conjunto, surgió como una línea de tiempo: las primeras canciones hablaban más de su yo adolescente, las del medio de sus veintitantos, y las últimas, de su vida más adulta. Esto nos permitió organizar el álbum como una especie de viaje, como una montaña rusa emocional. Aunque la música suele estar antes que las letras, cuando Stefan nos explicó esta perspectiva, todo encajó mejor.

Respecto al título del álbum, 'Who Will Look After the Dog?', al principio parece absurdo, pero luego resulta muy emotivo. ¿Cuándo os disteis cuenta de que esa frase significaba algo más que una broma?

La frase, dentro de la canción 'Hallways', cobra más peso porque trata un tema muy serio. Nosotros nos tomamos muy en serio nuestro trabajo, pero no a nosotros mismos, así que siempre buscamos ese equilibrio entre lo absurdo y lo emocional. Al pensar en el título del disco, esa línea cuadraba perfectamente: conecta con nuestro nombre de banda, PUP, y cuando vimos la portada con el perro conduciendo, fue como si todo hubiese estado predestinado. Ahora no podemos imaginar otro título.

"Cuando Stefan escribía las letras, se dio cuenta de que cada canción hablaba de relaciones distintas: consigo mismo, con sus amigos y familia, o con parejas."

Sé que este álbum empezó con Stefan aislándose para escribir. ¿Cómo fue el proceso de volver a trabajar todos juntos y añadir nuevos elementos a estas canciones? ¿Qué diferencia hubo respecto a discos anteriores?

En el disco anterior, 'The Unraveling of PUPTheBand', por la pandemia, escribimos todo encerrados, experimentando con sintetizadores y guitarras acústicas, cosas poco habituales para nosotros. Era necesario para no volvernos locos en aquel contexto. Para este nuevo disco quisimos volver a nuestros principios: guitarras, bajo y batería tocando juntos en una sala. Pero ahora somos mejores músicos y asimilamos la experimentación de una manera más natural, usando nuestras guitarras para crear sonidos raros en directo, sin depender de sintetizadores externos. Eso nos devolvió la emoción y también las frustraciones de estar juntos, pero creemos que ese roce hace mejores las canciones y refuerza nuestra amistad.

Elegisteis 'Paranoid', uno de los temas más agresivos, como primer single. ¿Qué os llevó a escoger precisamente esta canción para presentar el disco?

También lo dudamos, porque es una de las canciones más pesadas de todo el álbum, y no estábamos completamente seguros de que fuera la mejor elección. Sin embargo, sentimos que captura de manera muy fiel todo lo que queríamos transmitir con este nuevo material: tiene una parte en el verso que es casi shoegaze, donde las atmósferas son densas y envolventes; además, las guitarras, que en un inicio suenan bastante simples, poco a poco se van volviendo más complejas y elaboradas a medida que avanza el tema. La melodía es potente y se mantiene muy presente a lo largo de toda la canción, y ese final raro, un tanto drone, termina de redondear la experiencia. Para nosotros, representaba una reintroducción a nuestra música que era muy directa, cruda y honesta, especialmente después de haber pasado tanto tiempo sin sacar material nuevo.

 

Aunque el álbum habla mucho de rupturas y aislamiento, también transmite esperanza, como que la amistad dentro del grupo es lo que os mantiene en pie. ¿Sientes que este disco ha reforzado todavía más vuestro vínculo como banda?

Sí, absolutamente. Trabajar en música puede ser agotador, pero también nos une mucho. Al final todos queremos lo mismo. Aunque haya desacuerdos, tras terminar el disco siempre te das cuenta de que hemos logrado algo juntos y de que seguimos teniendo gente que se preocupa y está a la espera de nuestra música. Eso es un privilegio enorme. Por ejemplo, gracias a esto conocemos a gente a la que nunca habríamos podido llegar de ninguna forma, como ocurre ahora contigo (risas). Estamos hablando ahora desde Madrid y Toronto, y pronto estaremos tocando en Madrid otra vez. Una nueva visita a la ciudad que si no fuese músico, seguro que no me podría permitir. Ahí es donde cobra sentido todo el esfuerzo y sacrificio.

En vuestros dos últimos discos lanzasteis un EP poco después. ¿Tenéis pensado hacer lo mismo ahora?

Puede ser. Grabamos algunas canciones adicionales que finalmente no terminaron entrando en el álbum, no porque no nos gustaran o pensáramos que no eran buenas, sino más bien porque sentíamos que no encajaban del todo con el conjunto de temas que habíamos elegido para formar parte de este trabajo. Tal vez en algún momento decidamos usarlas y sacar un EP con ese material, o quizás no lo hagamos. La verdad es que todavía no lo tenemos muy claro y seguimos pensándolo.

"Para este nuevo disco quisimos volver a nuestros principios: guitarras, bajo y batería tocando juntos en una sala. Pero ahora somos mejores músicos y asimilamos la experimentación de una manera más natural"

Desde la primera vez que escuché 'Hear It', sentí que podría convertirse en una nueva favorita de vuestros fans. ¿Crees que esta canción o alguna otra podría convertirse en un himno en vuestros conciertos?

Cuando Stefan nos enseñó 'Hear It', el estribillo me pareció enorme, realmente impresionante. Desde el primer momento sentí que era uno de esos momentos que se quedan grabados y que, sin duda, creo que a la gente le va a encantar. También pienso que 'Concrete' tendrá un efecto similar, con esa energía que conecta de inmediato. Aunque, claro, uno nunca puede predecirlo del todo; al final, siempre hay un grado de incertidumbre. Lo que sí es seguro es que es muy emocionante ver cómo las canciones cobran vida de verdad una vez que salen al mundo, y más aún cuando ves a la gente disfrutándolas en directo, cada uno de su manera, conectando con ellas de formas que a veces ni siquiera imaginabas.

Respecto a 'Shut Up', la canción que cierra el disco, aunque trata un momento duro, siento que el sonido suaviza un poco el mensaje. ¿Buscasteis ese efecto de alivio emocional al final del álbum?

Sí. 'Shut Up' fue una de las últimas canciones que escribimos para el álbum, así que realmente no tuvimos demasiado tiempo para darle muchas vueltas ni para repensarla en exceso. Surgió de manera bastante espontánea: empezó siendo una canción muy íntima, casi contenida, y poco a poco fue evolucionando hasta terminar en una explosión de ruido, con una sensación muy indie rock, casi recordando por momentos a algo de Modest Mouse. Sentimos que era una forma perfecta de cerrar el disco, porque mostraba otra faceta de la banda, una más impulsiva y cruda, y nos permitía terminar el álbum de una manera diferente, dejando una última impresión fuerte y vibrante.

 

Pronto estaréis de gira por Europa y después por Estados Unidos y Canadá. ¿Sientes que vuestras giras han cambiado mucho con la experiencia?

Un poco sí. Ahora me preparo mejor, física y mentalmente. Hago ejercicio, intento descansar. También hemos aprendido que terminar las giras europeas en España es como un perfecto truco para lograr unas buenas vacaciones. Nos encanta tocar aquí y poder quedarnos unos días en lugares increíbles como Madrid, Barcelona o San Sebastián. Nos sentimos muy afortunados de poder vivir todo esto.

Al final de cada entrevista, nos gusta que el entrevistado deje una pregunta para el próximo artista. ¿Qué pregunta te gustaría dejar?

Me gustaría que les preguntes cuál ha sido la mejor película o libro que han visto o leído recientemente. Siempre me interesa saber qué están haciendo otros músicos y artistas.

Y para ti tengo una de Cam de Great Grandpa: ¿qué estás leyendo ahora? ¿Te está inspirando de algún modo en tu música?

Ahora mismo estoy leyendo algo ligero: un libro sobre Nikola Jokic, el jugador de baloncesto. No me inspira directamente para la música, pero el próximo libro que leeré es ‘One Day Everyone Will Have Always Been Against This’ de Omar El Akkad, sobre la situación en Oriente Medio. A veces necesito alternar lecturas ligeras con otras más intensas para mantener el equilibrio.

Tratando de escribir casi siempre sobre las cosas que me gustan.