Por Noé R. Rivas - mayo, 14th 2021

La banda berlinesa sigue demostrándonos como sus composiciones siempre poseen ese punto de imprevisibilidad y sensación de improvisación que marca las diferencias, logrando que durante sus más de diez años de trayectoria, cada uno de los trabajos que nos han presentado resulten cuanto menos convincentes. En su más reciente LP Die Gruppe, editado por Bureau B, la formación es capaz de dar el salto hacia momentos más relacionados con el misterio y las estampas nocturnas, abrazando de este modo toda la incertidumbre que nos rodea. A pesar de ello, en lugar de haber logrado un disco que apelase a la angustia, la banda se mueve más bien en parámetros opuestos, ya que a lo largo de sus composiciones logran más bien a dejarse llevar por las estampas que nos ofrezca la vida, intentando salvaguardar nuestra curiosidad por encontrar nuevos rincones atractivos. A través de una estética sobria, donde siempre destaca el componente electrónico más asociado a la brutalidad rítmica, se mueven como peces por el agua en esa mezcla precisa de dark pop y kraut bien disuelta en una gran clarividencia melódica. Este es el caso de una ‘Gift’ que en todo momento suena con un gran punto huidizo gracias a la incorporación del saxofón. Escupiendo estrofas con un gran poderío y sensación de intentar vencer momentos que nos ponen contra la espada y la pared, Ja, Panik alzan su voz y puño para intentar vencer la gran vertiginosidad de la vida moderna.