Sin lugar a dudas el mundo de la música siempre se encuentra muy asociado a todo lo que implica poder condesar todas las melodías encerradas en una canción y acompañarlas a través de un videoclip que refuerce el mensaje destilado en el tema en cuestión. Por lo tanto es de vital importancia poder crear fuertes conexiones entre todo lo que supone construir narrativas interesantes en el apartado musical y lo que suscita el apartado audiovisual, a la par de poder resultar una perfecta vía de promoción de toda la creatividad artística de los músicos. Ahora bien, la tarea en muchos casos no es sencilla, ya que detrás de un videoclip hay que tener fundamentos sólidos de que es lo que se espera lograr a través de la integración de la música e imágenes. Por ello, la promoción de vídeo para músicos puede resultar una tarea incluso más complicada que la propia composición del tema musical en cuestión. A través de múltiples factores que desarrollaremos más adelante, conoceremos de primera mano el éxito o el fracaso que puede llegar a tener una determinada pieza audiovisual.

¿Quién no se ha quedado prendado muchas veces de la potencia visual que poseen los videoclips setenteros donde el glamour musical también está asociado a los múltiples efectos especiales que poseen las estampas mostradas en ellos? Por suerte, hoy en día no es preciso contar con un gran abanico de recursos audiovisuales a la hora de acompañar un tema, pero sí que resultará preciso saber como responder ante el exigente reto de que el vídeo pueda calar hondo en el espectador. Siendo conscientes de como en ocasiones el menos es más, lo más importante sin lugar a dudas es tener en mente una mínima idea que pueda conectar todas las emociones que evocan las melodías o ritmos presentes en la música y ese afán por encontrar de forma pintoresca estampas que nos lleven al epicentro de la composición del tema. Todo un ejercicio relacionado con dejar volar la imaginación y encontrar el camino más clarividente para la mezcla de música e imágenes.

Ahora bien, en esta tarea a priori nada sencilla, seguramente necesites contar con profesionales del mundo audiovisual, pudiéndote asesorar cuales son las mejores opciones para que aquella brillante idea que tienes en mente pueda cobrar vida de una forma sólida. Desde ser consciente del presupuesto con el que cuentas hasta averiguar si va a ser preciso contratar actores externos a la propia banda musical, todos estos detalles deben de ser definidos desde el primer momento para poder obtener un resultado más espectacular y llamativo. Así es como entra en juego el arte de emocionar y hacer que el videoclip no sea un mero cúmulo de imágenes que pasan ante nuestros ojos sin pena ni gloria. Solo de esta forma es posible crear una cultura del videoclip que llegue a poder asociarse con un movimiento o un artista determinado, logrando que con tan solo visualizar unos segundos se pueda reconocer de forma fiel las señas de identidad que han forjado su carrera musical.