Por Noé R. Rivas - mayo, 26th 2020

La artista norteamericana acaba de publicar su tercer trabajo, subiendo el listón a la hora de encontrar nuevos ambientes de pop repleto de claroscuros con los que trasladarnos a ese mundo de reflexiones interiores donde aparecen nuevas perspectivas vitales. Encontrando un nuevo tratamiento a elementos como los sintetizadores, parece claro que Katie ha logrado su disco más cohesionado hasta la fecha, intentando al mismo tiempo que el abanico de posibilidades sea bastante amplio pero sin perder el control de las emociones y la intensidad impresa a las canciones. De esta forma temas como ‘Nowhere’ suenan con una perfecta capa mate, logrando un mayor efecto inmersivo a la par de reflejar momentos de gran desesperación. Por su parte, otros temas del disco al estilo de ‘Hammer’ se desenvuelven en terrenos más ambientales, relacionados con capturar una mayor granularidad del sonido y recoger de esta forma sentimientos más extraños. Toda una confirmación a la hora de bucear a través de estampas un tanto marchitas que acaban por resultar de lo más reveladoras.