Desde Quebec Josianne Boivin ha irrumpido en este 2018 con una gran fuerza, dejándonos con dos EPs que hacen las delicias de los amantes del pop más cristalino. Primero nos sorprendió hace unos meses con North Hatley, un debut de tres temas donde juntaba las guitarras de corte Lo-Fi sobre una base sintética que aportada continuidad para dejar destacar la voz de la artista. De una forma de lo más suave, con visos de luminosidad y dejando que su propuesta adquiriese cierto aire narcótico, MUNYA logró un debut de lo más destacado. La continuación ha llegado hace tan solo unos días con Delmano, su más reciente EP donde juega aún más con los teclados, sacando a relucir un halo de lo más especial donde poco a poco el carácter de su música se va definiendo hacia un lugar idóneo entre lo onírico y lo terrenal. Así es como con este conjunto de tres nuevas canciones incide sobre una vertiente pop incluso más bailable y sintética con la que seguir deslumbrando.